La Policía Nacional realizó ayer un homenaje a cuatro de sus alistados que perdieron la vida cumpliendo con su labor el pasado mes de octubre.
Es la primera vez que la entidad rinde tributo a los agentes policiales que mueren en el ejercicio de su deber, por lo que el director de la Policía Nacional, Ney Aldrin Bautista Almonte, manifestó sus condolencias a los familiares de las víctimas para que sientan el respaldo de los altos mandos.
Durante la ofrenda floral, realizada ante la estatua de San Judas Tadeo, en la institución, el titular de la PN indicó que se mantendrán “firmes y enérgicos” ante los asaltantes que la emprenden contra los agentes con la finalidad de despojarlos de sus armas de fuego.
Uno de los policías homenajeados fue el raso Paul Encarnación Mejía, quien fue sorprendido por sus agresores para quitarle su arma. En el hecho también recibió un disparo su hijo de dos años, quien falleció días después. El vocero del cuerpo del orden, Frank Félix Durán Mejía, señaló que José Taveras, acusado del crimen, murió durante un enfrentamiento con miembros de la institución en el sector Cristo Rey. Otros agentes caídos de la organización fueron el sargento Roberto González Sentil y los rasos Luis Manuel Díaz Batista y Randy Orlando Cabrera Arias. Durán Mejía señaló que el mejor reconocimiento para los fallecidos es continuar dignificando, valorando y haciendo visible el trabajo que hacen día a día todos los policías.
