Santiago. Ante los problemas de turbidez y la disminución de la producción de agua potable por el desfogue del embalse Tavera-Bao y la salida de operación de varios acueductos, comunidades de Santiago se quejan por la agudización de fallas del servicio.
En sectores como Las Charcas, en la parte suroeste de Santiago, sus moradores aseguran que llevan un mes sin recibir el vital líquido, situación provocada por el problema del cambio de una llave de paso.
En tanto que las comunidades de Ensanche Espaillat, Andy Ranch, o en Santa Lucía y Alma Rosa del distrito municipal Santiago Oeste, tienen más de una semana sin recibir agua potable.
“Antes nos enviaban el agua dos veces a la semana, pero ahora no llega nada y cuando mandan un poco, es amarilla”, dice Maritza León, residente en la parte suroeste de Santiago.
El director general de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan), Andrés Burgos y el director regional del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), Rafael Romero, informaron que debido a las constantes lluvias de las últimas dos semanas, se ha estado realizando el desfogue de la presa Tavera Bao, lo que ha disminuido la producción de agua potable.
Las operaciones de los acueductos han bajado alrededor de 20 millones de galones diarios, como consecuencia de la alta turbidez en las fuentes de captación.
En ese sentido, salieron de operación los acueductos de Las Charcas, La Barranquita y se espera que en las próximas horas entren a producir los sistemas de La Canela, Cienfuegos y Villa González, de seguir favoreciendo el estado del tiempo. Mientras que las plantas de Nibaje trabajan a baja capacidad.
Las zonas más afectadas con el suministro son el centro de la ciudad, Pueblo Nuevo, El Congo, La Joya, Baracoa, El Hospedaje, El Retiro I y II, El Ensueño, La Zurza, Nibaje, Bella Vista, La Barranquita, La Otra Banda, el ensanche Libertad y zonas aledañas.
