Santiago. Los moradores de Villa María, residencial de clase media y media alta, protestaron para demandar la intervención del sector, debido a que se ven expuestos a precarias condiciones de sus calles y a problemas de inundaciones cuando llueve.
Los comunitarios durante una concentración denunciaron que desde hace prácticamente seis años, enfrentan severos problemas de infraestructura vial, sin que las autoridades hayan dado respuesta definitiva.
Los manifestantes pidieron al Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) y a su director ejecutivo, Wellington Arnaud, a quien acusan de incumplir sus compromisos con la comunidad y de abandonar una obra que ya contaba con recursos asignados.
Rosanna Figuereo manifestó que Wellington Arnaud se ha reunido con ellos en cuatro ocasiones e inició la obra, sin embargo cuando revisaron la plataforma del Gobierno pudieron observar que se cancelaron los 117 millones de pesos asignados y no saben dónde está ese dinero.
Figuereo expresó el mal estado en que se encuentran las calles desde la 18 hasta la 36 las cuales catalogan de intransitables, relatando que cuando llueve, las casas se inundan.
Los comunitarios expresan que mientras el parque que llevará en nombre del papa Francisco, recién fallecido, avanza a toda marcha a pocos metros, Villa María sigue olvidada, sin calles, sin drenaje y sin esperanza.
“Trabajamos para salvar vidas, pero el Gobierno no nos permite ni salir” dijo Ramón Francisco, médico que reside en esta comunidad.
Recordó que el director de INAPA se reunió por última vez en octubre de 2024, donde aseguró que en marzo de 2025 arrancaría la obra, que ya estaba licitada, sin embargo en ese mes lo que hicieron fue cancelar el contrato, sin explicaciones.
Los residentes de Villa María exigen una auditoría pública sobre el manejo de los 117 millones de pesos cancelados sin explicación sobre la obra prometida.
