La Red por la Defensa de la Soberanía acusó a los periodistas Huchi Lora y Juan Bolívar Díaz de presionar a la empresa que imprimiría los tres millones de volantes para que no cumpliera con el contrato. La entidad reiteró la acusación de que los citados comunicadores son promotores de acciones “hostiles que, a nivel internacional”, realiza el Gobierno haitiano contra República Dominicana, en diferentes foros internacionales como el Caricom, Amnistía Internacional, la OEA y los Estados Unidos.
De igual forma, reveló que Huchi Lora y Juan Bólivar Díaz “lograron que la empresa impresora del famoso volante Boletín aéreo No.1, después de imprimir los tres millones de volantes y que iniciara su entrega con una primera partida de 153,000 unidades, incumpliera unilateralmente el contrato sin que mediara ninguna explicación y mucho menos decisión judicial”. También señala que luego de lograr la suspensión del boletín, iniciaron una campaña de mentiras con respecto al contenido de dicha publicación.
Destacaron que “estos comunicadores saben muy bien que nuestro pueblo ha conquistado con su propia sangre la libertad de expresión de que hoy todos disfrutamos y de la cual esta naciente red es una trinchera más de su defensa; saben bien que el artículo 76 del Código Penal no es una mordaza a la libertad de expresión, de lo que se trata es de otra cosa”.
A seguida refirió en su boletín de prensa número dos, que “no es lo mismo ejercer el derecho de criticar la sentencia 168-13 a lo cual todo dominicano es beneficiario, a que los discursos propalados por estos señores tengan exacta concordancia con las acciones de sabotaje, unas veces abiertos y desafiantes y otras veces ente bastidores, que son promovidos por el Gobierno haitiano e intereses extranjeros y nacionales en contra de nuestra patria, en una clara declaración de guerra en su primera fase, es decir, en la fase diplomática y mediática”.
Ambos sectores se han acusado mutuamente
El pasado viernes 15, Huchi Lora denunció la impresión de tres millones de panfletos difamatorios contra él y Juan Bolívar Díaz por sus críticas a la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional. Posteriormente, La Red Nacional por la Defensa de Soberanía interpuso una denuncia contra los comunicadores por supuesta rebeldía, hostilidad y desobediencia a la patria.
