La llegada del verano en el fútbol normalmente trae con ella despedidas. Este fin de semana tocan algunas.
Para empezar, despedimos la temporada europea con un duelo de titanes en Berlín por la final de la Champions League.
Mañana, a las 2:45 p.m. se verán las caras el FC Barcelona y la Juventus en una reedición de los cuartos de final del 2003. Los italianos vuelven al escenario central del fútbol europeo tras años mirándolo desde la periferia.
El último obstáculo en su camino hacía el exclusivo ‘Club Triplete’ es un Barça que parte como favorito en las apuestas.
El conjunto culé también anda buscando el trébol y, de ganarlo, se convertiría en el único equipo en la historia que lo consigue dos veces. Desde aquí lo vemos 60-40 inclinándose hacia el Barça… ¡Esperemos buen fútbol!
Coincidentemente, durante aquellos cuartos de final del 2003, uno de los dos goles del Barça contra los bianconeri lo anotó una leyenda blaugrana que, tras el partido del sábado, también firmará su despedida del fútbol europeo: Xavi Hernández. Eso no es todo.
En los últimos días han surgido reportes afirmando que otro maestro en las artes del centro-campo, Andrea Pirlo, habría aceptado una oferta para desplegar su fútbol en el New York City FC de la MLS la próxima temporada.
De ser esto cierto, el partido del sábado sería el último vals para dos de los mediocampistas más dominantes del fútbol en los últimos diez años. Tengan a mano el Kleenex, que nos pondremos nostálgicos.
Todo lo contrario con la última despedida, quizás la más importante de todas. Esta semana, tras 17 años al frente de la FIFA, Joseph Blatter anunció su renuncia como presidente, invocando al mismo tiempo elecciones especiales para elegir a su sucesor.
¿Los trazos finales de su legado? Habría que preguntarle a Loretta Lynch. Lo que es seguro es que estos eventos marcarán un antes y un después.
En el fútbol se sienten vientos de cambios administrativos a fondo. Crucemos los dedos. Que sean para bien.
