Fue muy difícil tomar la decisión de separarse artísticamente de su padre Wilfrido Vargas. Él, conocedor del mundo del espectáculo y de las propuestas indecentes que enfrenta una artista para crecer, no estaba dispuesto a que su hija Alina formara tienda aparte.
“Mi padre es muy protector, ya todo está bien entre nosotros. Al principio se hizo difícil porque él quería que yo me quedara en el frente de la orquesta e iniciara mi carrera como solista”, confesó la merenguera en entrevista con El Caribe.
Sin perder ningún detalle, la ex integrante de la orquesta de Wilfrido Vargas enfrenta una nueva etapa en su carrera con una fuerte estabilidad emocional y la independización profesional que toda artista anhela.
“Todo artista tiene su etapa de evolución, de crecer, de brillar con luz propia. Me siento preparada. A veces tu temes en dar un paso porque no te sientes 100% segura, pero llegó el momento”, dijo la cara femenina del clan Vargas.
Con 15 años de carrera en los escenarios, de los cuales 11 fueron junto a su padre y mentor musical, ha podido desarrollar otros campos del arte como el modelaje y la actuación, aunque expresa que su mayor triunfo obtenido ha sido en la música.
Su Orquesta Alina Vargas está diseñada para levantar emociones, risas y bailes por parte del público ya que su repertorio está lleno de ritmo y sabor caribeño, junto a las diferentes culturas que componen los integrantes de su orquesta: República Dominicana, Cuba y Colombia. “Me considero una mujer más madura, soy luchadora y estoy consciente del trabajo que debo llevar a cabo, todo eso depende de mí porque he invertido para sacar este proyecto adelante. Soy una bendecida porque trabajo en lo que me gusta y con personas que amo”, dijo.
Radicada desde el 2008 en Bogotá, Colombia, Alina está de vuelta en Quisqueya para promocionar su sencillo más reciente que es una prueba de su primera producción en solitario. “Estoy armando el muñeco de lo que será mi próximo disco.
Ahora la música se mueve de un modo diferente con lo de la piratería y las disqueras. Ahora, el artista graba un tema, lo publicas y haces promoción. No quiero terminar de hacer la producción sin antes sacar un tema de promoción como es ‘Se acabaron las mujeres buenas’”.
Un álbum de música fresca y moderna
La nueva propuesta discográfica vendrá cargada con ocho temas en los que reinará el merengue urbano con toques modernos y una bachata. Es una meczla de estilos contemporáneos con los cuales ella busca diversificar su propuesta.
“Tú sabes que yo trabajo fuera del país y no puedo pensar sólo en el público dominicano, cuando es una producción internacional. Estoy muy contenta porque es una etapa nueva y luego de estar muchos años concentrada trabajando en la orquesta de mi padre llega el momento de desarrollarme profesionalmente sola”, comentó la artista. Agregó: “Tengo fe en el proyecto porque es un trabajo que se está haciendo con amor y me siento bendecida porque las puertas se me están abriendo. En estos momentos, estoy trabajando sola, soy una artista independiente.
Mi padre, Wilfrido, me asesora en decisiones, pero no está conmigo ni es mi casa disquera”, detalló la artista que está dando los toques finales de su próxima producción”.
Mujeres, en ofensiva musical
Otras artistas femeninas se están abriendo paso en la música como son Milka “La más dura” y La Materialista, ambas del género urbano pero cada una con un estilo muy particular. A esto se suma el trabajo que viene realizando la rapera Melymel “La Mermelada” que en los últimos meses ha estado sonando con mucho vapor, ya que es la voz femenina del “Verano todo lo mueve”.
También, hay que incluir en este grupo a la merenguera urbana Juliana, ganadora del Premio Casandra 2011 como la más destacada del 2011 en su género, y en la bachata contamos con la joven Natalia, del dúo que integra junto a Monchy.
