ROMA — La afluencia de electores era baja el lunes en Italia en la segunda jornada de los comicios locales, que constituyen la primera prueba de la aceptación del primer ministro Mario Monti desde que fue nombrado al cargo para que salve al país de la crisis de la deuda.
Los analistas advierten que el curso de la votación podría ser indicio de la inconformidad que han suscitado las medidas de austeridad de Monti y el apoyo al mismo que le han dado los principales partidos políticos desde que reemplazó hace seis meses a Silvio Berlusconi.
Según el gobierno, la afluencia de votantes alcanzó el domingo, en la primera jornada, 55%, seis puntos porcentuales abajo del anterior proceso similar. Los centros de votación reabrieron medio día el lunes.
Unos 9,5 millones de italianos están inscritos para que participaran el domingo y el lunes en los comicios para elegir a quienes ocuparán los principales cargos de 942 alcaldías y ayuntamientos. Las ciudades mas grandes incluyen Verona, Génova y Palermo.
Los resultados definitivos de ambas jornadas electorales se esperan para el lunes por la noche.
Tanto el partido de centroderecha de Berlusconi como el Partido Demócrata, de centroizquierda, han apoyado a Monti, quien fue designado en noviembre luego de que los mercados perdieron confianza en la capacidad de Berlusconi para reducir la deuda y fomentar el crecimiento.
El gobierno de Monti ha aplicado aumentos de impuestos, recortes presupuestarios y reformas al sistema de pensiones que la UE y los mercados consideren necesarias para restablecer la estabilidad financiera de Italia.
El enojo público, sin embargo, se incrementa debido a las medidas de austeridad y el aumento del desempleo.
También se ha registrado una ola reciente de suicidios y otros actos desesperados atribuidos a los problemas económicos de los italianos.
