Bandas de menores azotan sector Cienfuegos

Santiago.-Representante de organizaciones comunitarias y religiosas mostraron preocupación por la incursión de menores en bandas que operan en el sector Cienfuegos. A los problemas que enfrentan de inseguridad y miseria, en el barrio Santa…

Santiago.-Representante de organizaciones comunitarias y religiosas mostraron preocupación por la incursión de menores en bandas que operan en el sector Cienfuegos.

A los problemas que enfrentan de inseguridad y miseria, en el barrio Santa Lucía se están organizando pequeñas bandas de atracadores de edades comprendida de 12 a 15 años.

José Alberto Polaco, presidente de la junta de vecinos mostró su preocupación por la incursión de menores.

Recientemente, en esa barriada fue instalado un cuartel policial móvil para tratar de reducir los hechos de delincuencia.

Sin embargo, esta medida no logra detener la incursión de menores y adolescentes en hechos de atracos y robos.

“Lo que está sucediendo, es muy preocupante, ya ni los vendedores quieren acudir a ofrecer sus productos en este barrio debido a que ya han sido despojados de sus mercancías y sus celulares”, indicó Polanco.

Aunque la junta de vecinos está dispuesta a iniciar operativos preventivos junto a los agentes policiales, dicen que aún no reciben respuesta de las autoridades policiales.

Hasta las viviendas cercanas a dicho cuartel ha sido sustraída en varias ocasiones por las bandas de delincuentes juveniles.

El pastor Pablo Ureña quien opera el programa Niños con una Esperanza en el barrio Santa Lucía, calificó como muy serio, la incursión de menores en asaltos.

 “Esto es altamente preocupante la ola de robo y atracos que azota a varias  comunidades de Cienfuegos. El caso es tan terrible que vemos niños que al parecer manejados por adultos son utilizados en robos”, expresa Ureña al hablar con reporteros de El Caribe.

El religioso asegura que hasta menores con edades comprendidas entre ocho y once años mantienen en zozobra la barriada.

“El gobierno tiene que responder, ya que los padres de estos niños y adolescentes lo han dejado a su suerte y no hacen nada para controlarlos”, puntualiza el pastor. Los propietarios de colmados también muestran su preocupación por la intranquilidad que genera la delincuencia en esa barriada y por la falta de acción de la policía para dar respuesta a las comunidades.

Llaman a la policía a reforzar el patrullaje y hacer labor de inteligencia para atrapar a los responsables de actuar en hechos delictivos.

 

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