Santiago. Marchas y piquetes de seis comunidades por calles, agua potable y contra las tandas de apagones, convirtieron en un caos la ciudad.Cientos de trabajadores de la construcción marcharon en demanda del pago de cuatro mil millones de pesos, que supuestamente adeuda el sector privado.
Mientras, la gobernación provincial y las oficinas de la distribuidora Edenorte fueron abarrotadas por estudiantes, amas de casa y carpinteros.
En las comunidades Las Palomas, en Licey al Medio, y La Piña, en Cienfuegos, sus moradores recorrieron sus polvorientas calles reclamando el asfaltado.
También en Monte Adentro, los representantes de juntas de vecinos y grupos religiosos marcharon para pedir que sean asfaltadas sus calles y la terminación de obras prioritarias.
Demandas barriales
Los primeros en manifestarse fueron los moradores de la comunidad Arroyo Hondo Abajo, quienes con pancartas y consignas se concentraron en la oficina de Edenorte para denunciar tandas de apagones de hasta 15 horas seguidas. Previamente marcharon desde la barriada ubicada al sur de Santiago.
Rafael Pichardo, un usuario del servicio eléctrico, dijo que a pesar de que solo le ofrecen dos y tres horas de luz, la tarifa se ha elevado en un cien por ciento.
“Antes en mi casa pagábamos 800 pesos, ahora llega de mil 600 y hasta mil 800, a pesar que solo recibimos apagones”, apuntó.
En la gobernación provincial se concentraron estudiantes, representantes de juntas de vecinos y los trabajadores de la construcción.
Los estudiantes de la escuela Miguel Ángel Jiménez, de la Yagüita de Pastor, dicen que reciben docencia sentados en el piso por falta de butacas.
Obreros demandan pago millonario
Trabajadores de la construcción marcharon en demanda del pago de cuatro mil millones de peso que, dijeron, les adeudan el Gobierno y empresas privadas locales. La caminata partió del barrio La Joya, luego pasó por la avenida Hermanas Mirabal, la 30 de Marzo, la calle Del Sol hasta la gobernación. Los obreros aseguran que están cansados de reclamar el pago.
