Una de las cosas que mayor asombro negativo produce a los extranjeros que visitan por primera vez la República Dominicana es la manera de conducir de sus habitantes.Es común el irrespeto a las señales y a las leyes de tránsito, la imprudencia y el manejo temerario y un conjunto de prácticas habituales del conductor dominicano promedio que han sido causa eficiente de numerosos problemas de importancia incluyendo trágicos accidentes.
A pesar de que esto es usual no se ha hecho hasta ahora una campaña de concienciación con potencial de generar un impacto real. Por lo anterior es que resulta novedosa y muy trascendental la genuina preocupación que ha mostrado el Ministerio de Obras Públicas por el tema y sus planes de difundir exhortaciones educativas para contribuir a que en el país mejore la manera de conducir, comenzando por el mensaje “no bloquees las intersecciones”.
Con apenas algunos cambios como esto de no bloquear las intersecciones, respetar los carriles y las indicaciones de los semáforos, ceder el paso en los giros, conducir a una velocidad prudente, entre otros, se puede mejorar el flujo del tránsito en República Dominicana en un 15%.
La citada mejoría de apenas un 15% representaría ahorros tangibles al país de 840 millones de dólares, incluyendo 116 millones en la factura petrolera. También, de forma intangible se puede lograr un ahorro de entre 2,000 y 2,400 millones de dólares más.
Con simplemente cumplir las reglas de tránsito sin dudas habría menos contaminación acústica y contaminación del aire, mayor ahorro de tiempo y menos estrés, lo que a su vez tiene efectos positivos en la salud y en la productividad laboral.
Por todo lo anterior y mucho más es tan relevante y significativa la campaña iniciada hace unos días por el Ministerio de Obras Públicas pues no se trata de propaganda y publicidad, sino de la promoción de mensajes con el fin del contribuir al bienestar de la colectividad.
Por ello, no sólo debemos apoyar y aplaudir la medida sino también poner en práctica los consejos y colaborar con la difusión de las imágenes y videos que son parte de ella entre nuestros familiares y relacionados, para dejar de ser parte del grave problema del tránsito que hay en República Dominicana y comenzar de una vez y por todas a ser parte de la solución.
