El cuerpo de Claudio Francisco Caamaño Vélez estará en la Funeraria Blandino hasta el mediodía de hoy. De allí pasará al Cementerio Nacional. Claudio Francisco Caamaño Vélez, hijo del guerrillero constitucionalista Claudio Caamaño Grullón, perdió la vida por una bala que le perforó la cabeza. Pasadas las 11:00 de la noche del domingo, Claudio se encontraba compartiendo con amigos en el colmado El Fenómeno de Pizarrete, provincia Peravia, cuando un hombre conocido como Bocho lo asesinó de un disparo, sin mediar palabras, sin levantar la voz, sin esgrimir razones.
Michael Miguel Valdez, posteriormente detenido por la Policía, admitió que realmente el disparo iba dirigido hacia él, porque meses antes llegó a sostener enfrentamientos personales con el mentado Bocho. Pero al ver el desenfunde del arma y el gesto de ataque del hoy prófugo, Valdez se agachó y el proyectil se incrustó en otro cuerpo.
La irreversible confusión hoy llena de tristeza a la familia Caamaño Vélez, y a toda la comunidad de Pizarrete, donde Claudio Francisco estudió y trabajó. Hacía cerca de diez años se desenvolvía como ayudante de producción y comercialización de los frutos tropicales que su padre cultiva en una finca de El Carretón, en la misma provincia.
“En este país sólo están seguros los narcotraficantes, los funcionarios corruptos y los lavadores de dinero. La ciudadanía está desprotegida”, lamentó el joven Claudio Antonio Caamaño Vélez, con quien algunos medios y usuarios de las redes sociales ayer confundieron a la víctima. Son hermanos, y familiares directos del expresidente constitucional Francisco Alberto Caamaño Deñó.
El Claudio asesinado guardaba un estrecho parecido con el Coronel de 1965 y Caracoles. Su cuerpo estará expuesto en la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln hasta el medio día de hoy. Desde ese punto será trasladado al Cementerio Nacional de la avenida Máximo Gómez.
“Es lamentable lo que está sucediendo. Ni este gobierno, ni el anterior le han garantizado al país seguridad ciudadana. Hay personas portando armas sin control”, dijo el exguerrillero Caamaño Grullón, afligido por la muerte brusca de su hijo y compañero de labores.
Claudio Francisco Caamaño Vélez dejó en la orfandad a un niño de tres años, el mismo que horas antes de ser asesinado mostró por las calles de Pizarrete como el Rey del Carnaval de la comunidad sureña. Aquel fue su último baño de pueblo.
Los medios se confundieron de nombre
Ayer en la mañana en las redes sociales y en los principales medios digitales del país se informó que Francisco Antonio Caamaño Vélez, coordinador de Un Paso por mi país y dirigente estudiantil de la UASD, era el joven asesinado.
Pasaron más de tres horas para que éste hijo del exguerrillero Claudio Caamaño Grullón señalara el error de la noticia y explicara el deceso de su hermano, estudiante de Relaciones Internacionales de Unicaribe.
