Si no hubiese sido por los call centers, yo no sé lo que habría hecho en este país… “El deportado ha encontrado un amparo en los call centers, ahora, aquí hay cuatro o cinco que no quieren saber de nosotros, pero hay que dejarlos con su idea, nosotros somos más serios, eficientes y disciplinados que otros que no son deportados”. Las expresiones son de Herminio Saldaña y Juan Maríñez, dos empleados de call centers que fueron deportados de los Estados Unidos.
Explican que esos centros de llamadas se han convertido en lugares de refugio para los deportados debido a que no les dan empleo en empresas privadas ni en instituciones del gobierno porque creen que son delincuentes, aunque les demuestren que los errores que cometieron en otro país son cosas del pasado.
A pesar de que no todos los empleados de los call centers son deportados, la percepción que tienen propietarios de los mismos es de que son más del 70%. No existe un registro oficial ni privado que lo confirme.
¿Por qué los buscan?
Las principales razones son el idioma y el conocimiento de la sociedad norteamericana. María Isabel Castillo, socia de un call center nada más de deportados, explica las razones por las que prefieren contratar los servicios de los repatriados.
“No es por discriminar a nadie, sino que simplemente necesitamos personas que hablen inglés y las más idóneas para eso son las que están aquí por algo que ha pasado allá y fueron deportados a este país, porque el inglés de ellos es excelente, es cien por ciento, además de eso, ellos saben cómo se manejan las cosas en los Estados Unidos”, dice.
Como el objetivo de los call centers es que el cliente que llama desde los Estados Unidos crea que quien le responde está en su país, el aspecto del acento es muy importante y por eso los dominicanos tienen más aceptación porque tienen un acento no tan marcado como por ejemplo el de un hindú.
“A ellos (los deportados) le sale un inglés más fluido, más natural y el cliente no sospecha que es desde República Dominicana que se le habla, pero además son las personas más responsables, ellos vienen puntual, no faltan, hacen lo que tienen que hacer y no pelean”.
Sin embargo, a la hora de contratarlos se toman en cuenta algunos aspectos como, por ejemplo, si fue deportado por problema de fraude con tarjetas de crédito, no se les asigna esa tarea.
Las condiciones
Los grandes call centers reclutan su personal mediante los requisitos de cualquier empresa organizada y ofrecen los beneficios de ley como seguro médico, doble sueldo, vacaciones y algunos hasta bonificaciones.
En cambio, parte de los pequeños centros que operan prácticamente de forma clandestina, solo ofrecen el salario, sin ningún otro beneficio.
Algunos call centers laboran las 24 horas con un personal que rotan de 7:00 de la mañana a 4:00 de la tarde; de 4:00 hasta las 11:00 de la noche y de esa misma hora hasta las 7:00 de la mañana del día siguiente.
Otros candidatos
Además de los deportados, los call centers están atentos a los jóvenes que reciben el curso de inglés por inmersión que desarrolla el Gobierno y a través del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, pero además de los técnicos en informática egresados del Instituto Tecnológico de Las Américas (ITLA) por su nivel de preparación.
Otros son captados de universidades y a todos los instruyen para que les sirvan y puedan conseguir dinero para sus estudios y mantener a su familia, en caso de que la tenga.
Los principales call center del país
Los más conocidos call centers instalados en República Dominicana, algunos en zonas francas, y la mayoría de procedencia internacional, son ACS, String, Lenguage Line, Opinion Access, Alorica, Vimenca, Santo Domingo y Pacific Interpreters, entre otros.
También existen otros centros más pequeños que ofrecen diversos servicios al mercado de los Estados Unidos, principalmente, y que se registran en la internet como empresas anónimas que están diseminadas principalmente en Santo Domingo Este, el Distrito Nacional, San Francisco de Macorís, Santiago de los caballeros y el municipio de Boca Chica.
