El camino al éxito

Los teóricos de la estrategia política sostienen que para recorrer sin problemas y en forma expedita, el camino hacia el(os) objetivo(s) trazado(s),  jamás puede condicionarse el tránsito hacia el éxito, al fracaso eventual de la estrategia…

Los teóricos de la estrategia política sostienen que para recorrer sin problemas y en forma expedita, el camino hacia el(os) objetivo(s) trazado(s),  jamás puede condicionarse el tránsito hacia el éxito, al fracaso eventual de la estrategia del adversario, sino a la efectividad de la propia. La reflexión viene a cuento a propósito del muy apropiado metamensaje enviado por el presidente Leonel Fernández a los que han apostado a que las alegadas –y a veces nada disimuladas- diferencias entre sus seguidores y los del presidente Danilo Medina podrían corroer las posibilidades futuras y la unidad del PLD. Muy cierto y válido es en política buscar provecho de cualquier debilidad de los rivales, pero una cosa es ello y otra es pensar que solo si se dieran condiciones internas adversas podrían caer doblegados nuestros contendores. Muy bueno es que lo dijera El Príncipe: En el PLD no hay leonelistas ni danilistas. Hay peledeístas. Suena lindo, tan lindo que muchos pudieran creerlo y dormirse en sus laureles…
Preparan proyectos
Tan entusiasmados han quedado los reformistas por el desenlace de sus dos últimas asambleas, en las que resultaron fallidos los pronósticos de fuertes e incontrolables tormentas, acompañadas de tronadas y descargas que pudieran ser mortales así como vientos de gran intensidad, que tengo la confidencia de que ya se preparan nuevos proyectos de precandidaturas presidenciales y de otro tipo en esa organización, adicionales a los que ya se conocen. Siendo así las cosas, se puede asegurar que en las semanas y meses venideros, pero en el muy corto plazo, de la traba colorá veremos surgir novedosos aspirantes a candidaturas, lo que –a decir verdad- parece que llevará ánimos frescos y entusiasmo de diversa índole a las gradas reformistas, aunque bien podría decirse que tal vez es muy temprano para ablandar habichuelas, o en el otro extremo que ninguno de ellos quiere que lo atrapen asando batatas. Ya veremos lo que traerá el barco…

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas