Tamboril.-Los pacientes con síntomas diarreicos superan ya los 320 afectados en este municipio, mientras en las comunidades donde mas casos se han registrado fue suspendido el servicio de agua como medida preventiva.
Tan solo este domingo fueron ingresados 17 pacientes en el hospital municipal y otros seis en la clínica Unión Medina, aunque tres horas más tarde solo cuatro permanecían internos.
El epidemiólogo, Félix Martínez dijo que tanto Salud Pública como la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago iniciaron la supervisión y monitoreo del agua, en las comunidades de mayor incidencia.
Los pacientes ya no solo llegan de las comunidades Los Polanco, Domingo Alegre o El Calientísimo, sino de Canca la Piedra, distrito municipal donde en mayo de este año se produjo un brote de cólera. En estas barriadas piden declararlo en estado de emergencia. En los primeros diez días se registraron 237 casos.
Braulio Santana tuvo que ingresar a su hija de dos años de edad con síntomas de diarrea y vómito.
“Estamos tomando todas las medidas necesarias para controlar el brote y determinar las causas de los problemas diarreicos”, apunta Martínez.
Hasta el momento Santana desconoce las causas de la afección.
En Tamboril no todos creen que el agua que llega desde el tanque de la Coraasan es la causante del brote diarreico, sino a la contaminación del río Licey, debido a que la mayoría de granjas de cerdo son instaladas en la parte alta.
