Católicos celebran el inicio de la Cuaresma

Decenas de feligreses se dieron cita ayer a la Catedral Santa María la Menor para recibir la imposición de la ceniza, durante una misa celebrada con motivo al inicio de la Cuaresma.

Decenas de feligreses se dieron cita ayer a la Catedral Santa María la Menor para recibir la imposición de la ceniza, durante una misa celebrada con motivo al inicio de la Cuaresma.La misa fue oficiada por el párroco Nelson Clark, quien asistido por el sacerdote Guillermo Perdomo, colocó ceniza en la cabeza de los fieles en señal de arrepentimiento.

Clark expresó que la cuaresma es el mejor tiempo para encontrarse con Dios y dejar salir la verdad para poder encontrar la paz.
“La sociedad esta viviendo tiempos de mucha lujuria y sexualidad, donde se cometen muchos pecados, por eso recomendamos la cuaresma para rezar y acercarse a Dios”, dijo Clark durante la homilía.

Señaló que la Cuaresma nos recuerda que somos polvo y al polvo volvemos, por lo que las cosas hechas con tierra son frágiles y débiles y bien necesitadas de Dios.

El “Miércoles de Ceniza”, que supone ayuno y abstinencia, fue celebrado en templos de la Capital y las provincias.

De esta manera se dio inicio a la Cuaresma, que son los 40 días de preparación para la Pascua que culminará el Domingo de Ramos, que a su vez marca el inicio de la Semana Santa. Coincide con los cuarenta días que Jesucristo pasó en ayuno y en oración en el desierto.

Mensaje del Papa

En su mensaje para la Cuaresma 2014, titulado “se hizo pobre para enriquecernos con su pobreza”, el papa Francisco señala: “Con ocasión de la Cuaresma os propongo algunas reflexiones, a fin de que os sirvan para el camino personal y comunitario de conversión. Comienzo recordando las palabras de San Pablo: Pues conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, el cual, siendo rico, se hizo pobre por vosotros para enriqueceros con su pobreza”, dijo el papa Francisco, en el primer mensaje escrito de su pontificado para estos tiempos de liturgia de los católicos, destacando la oración, el ayuno y la limosna.

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