Según el informe anual de la Sociedad Estadounidense de Cirujanos Plásticos (ASPS), en 2011 hubo un incremento de 71% en el número de estos procedimientos en ese país, con 20.680 operaciones.
Tal como señalan los cirujanos, la mentoplastia -la alteración del mentón- se lleva a cabo para “mejorar el perfil del individuo” reduciendo una barbilla prominente o alterando una “débil”. Y según la ASPS la creciente tendencia de someterse a este procedimiento “parece surgir en parte por el aumento en el uso de la tecnología de conversaciones en video, por el incremento en la edad de la población y el deseo de tener éxito en el lugar de trabajo”.
Esta se realiza con una incisión en la barbilla para colocar un implante en la estructura ósea o para reducir el hueso en esa zona. El objetivo, dicen, «es hacer que la nariz se vea más pequeña, la mandíbula más delineada y la forma general de la cara más proporcionada».
Según la ASPS, durante 2011 el número de mentoplastias se incrementó con mayor rapidez que el aumento de senos, las inyecciones de Botox y la liposucción combinadas. La operación se incrementó tanto en hombres como mujeres y en pacientes jóvenes, de 20 años o más, como aquéllos de 40 años o más.