¿Cómo conquistó los jóvenes?

Esa es la pregunta que me he hecho de cómo la presidenta electa de Chile, Verónica Michelle Bachelet Jeria, conquistó al fortalecido movimiento de jóvenes y estudiantes de ese país.Antes de hacer mis reflexiones sobre el tema, estoy…

Esa es la pregunta que me he hecho de cómo la presidenta electa de Chile, Verónica Michelle Bachelet Jeria, conquistó al fortalecido movimiento de jóvenes y estudiantes de ese país.

Antes de hacer mis reflexiones sobre el tema, estoy seguro habré llamado la atención al colocar el poco conocido nombre completo de Michelle Bachelet, que así de ésta última gracia es como se le conoce.

Usar la brevedad en el nombre es tener sentido de la comunicación para la actividad política, el arte, la literatura, el ejercicio profesional, los deportes y actividades de comunicación.

En su momento Juan Bosch recomendó a Pedro Julio Mir Valentín llevar su nombre como artista de la palabra a Pedro Mir. Fue que también a él Pedro Henríquez Ureña, el intelectual más admirado y respetado por Juan Bosch, le sugirió que redujera a dos voces su largo nombre de Juan Emilio Bosch Gaviño.  

Deduzco, por lo explicado, que Michelle Bachelet acortó su nombre por lo mismo. Definitivamente, Michelle Bachelet y su equipo saben lo que hacen para dirigir el proceso chileno. Ganaron las elecciones y atrajeron a los jóvenes para lograrlo.

¿Y cómo lo hizo? Es la pregunta. Obviamente, dieron el paso necesario. Primero se plantearon “derrotar la desigualdad” y lograr un Chile “justo y moderno”.
Esas expresiones no son suficientes; son palabras que el viento se lleva; “blablableo”, como dice una compañera.

Pero se acompañaron con propuestas específicas, fuertes y arriesgadas, para decirlas en medio de un proceso electoral. Propuso una educación de calidad y de gratuidad universal, buscando los recursos con una reforma tributaria.

Logró que “Nueva Mayoría”, suma de fuerzas que le postuló, ganara las elecciones. Desplazando a la derecha chilena del poder.

La derecha perdió aunque había logrado estabilidad macroeconómica y crecimiento, y mantuvo la presión tributaria en 20%, que es el promedio de América Latina, aunque pudo llevarla a los niveles de Argentina y Brasil, por encima de 30%, para beneficiar a la población con políticas públicas “justas y modernas”.

Pero el presidente saliente, Sebastián Piñera, gobernó para generar más riquezas en beneficio de las fuerzas económicas y sociales de derecha que representa, y no iba a quitarle beneficios.

En cambio, “Nueva Mayoría” dio un paso progresista que no sólo atrajo a los jóvenes, sino que también los integró en la boleta electoral. Excelente referente para el PLD, gobernar para hacerle la “guerra a la desigualdad” e integrar a una franja de  jóvenes que se distingan como líderes de ellos planteando los puntos programáticos más demandados por el país.

Son temas puntuales: salud, empleo, seguridad ciudadana, energía, medio ambiente y educación de calidad. Ésta, educación, es nuestro ejemplo de cómo no hacer las cosas, buscamos los recursos presupuestales (4%) para luego no saber qué hacer; debe ser diseñar políticas públicas pactadas ampliamente y luego los recursos presupuestales.

En América Latina los jóvenes están liderando a sus pueblos y demandando de los partidos superar con políticas públicas la desigualdad y falta de modernidad, y eso lo sabe hacer el PLD. l

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas