Muchos concursos de arte están poniendo como condición el que los participantes sean menores de determinada edad, como si el Arte para ser contemporáneo sólo puede ser hecho por gente muy joven de edad. Es una tendencia que han metido de contrabando en las premiaciones y concursos de arte. La gran mayoría de los jóvenes artistas se creen que el mundo empezó con ellos, y al no tener una educación sólida desconocen la historia del arte, sus manifestaciones y, sobre todo, sus revoluciones. Se creen que todo es nuevo bajo el sol. Pero lo peor es que los miembros de jurados están en la misma situación que esos jovencitos, que por serlo tendrían una atenuante, y ahí sí se complica la situación; porque la incultura de un jurado sobre el tema puesto en sus manos, significa desastre seguro en el resultado de su “experticia” como evaluador. ¿Qué sucede cuando hay falta de formación cultural en esos casos? Que aparecen los mesías del bombo cultural. Los que pregonan “La pintura ha muerto” o demás sandeces. Se creen que anunciando una “revolución” está la salvación a sus faltas de formación académica y cultura general; pero como “Revolución” suena emocionante y progresista, ahí se lanzan. ¿Ha visto alguien cosa más retrógrada que la “revolución cubana”? Una obra de arte contemporánea la puede hacer uno de 15 años como uno de 85 años, porque es un concepto, no una edad biológica. La edad no es un mérito adicional. Salvo en concursos infantiles.
El estudio de la historia en forma lineal, como si los hechos siguieran un guión, produce la sensación de que después de hoy mañana tendrá que venir, obligatoriamente, algo distinto y mejor. Es la idea de seguir cambiando porque el “progreso” viene a la vuelta de la esquina porque sí, porque así suceden las cosas. ¿En arte es mejor el Modernismo que el Renacimiento?, ya que los historiadores tradicionales dicen que los siglos XV y XVI son una época de transición entre la Edad Media y la Moderna. Si se sigue esa línea de pensamiento caeríamos en que el Contemporaneísmo es mejor que el Modernismo, y que el Extra contemporaneísmo es mejor que el Contemporaneísmo. En Arte como casi en todo lo importante las cosas no siguen un guión obligatorio, ni siquiera en Ciencias, los grandes descubrimientos científicos de hoy se hicieron siglos antes de que fueran medianamente entendidos, pero que ahora son “la modernidad tecnológica de estos tiempos”. No es el rechazar lo nuevo por ser nuevo, es no aceptar lo viejo bueno porque no es nuevo. Parece que seguiremos viendo convocatorias a concurso llenas de frases huecas y camisas de fuerza.
