Washington. Con sus sueños de llegar a la Casa Blanca cada vez más en duda, el candidato republicano Donald Trump está pasando tiempo precioso de su campaña promoviendo sus negocios.A menos de dos semanas del Día de las Elecciones —y con su rival Hillary Clinton trabajando optimistamente para ganar estados usualmente republicanos— Trump se tomó un respiro de la campaña el miércoles por la mañana para inaugurar formalmente su nuevo hotel en Washington. Sus declaraciones en el hotel, que ha pasado trabajos para llenar habitaciones en medio de la controversia de su campaña presidencial, siguieron a una visita el martes a otra de sus propiedades, el campo de golf Doral en las afueras de Miami.
“Por debajo del presupuesto y antes de tiempo. Muy importante. No escuchamos esas palabras muy a menudo, pero ustedes las van a escuchar”, dijo Trump, vinculando las labores en el hotel a su prometida actuación como presidente. Aunque el candidato centró sus comentarios en su mensaje político, el evento estuvo cargado de promoción de sus negocios. Parados bajo candelabros, altos ejecutivos de la compañía, incluida su hija, elogiaron el hotel y los éxitos de la compañía. Tras unas breves declaraciones políticas, Trump y su familia se dirigieron al vestíbulo, donde cortaron una cinta con tijeras doradas.
