Las enfermedades comienzan a afectar a parte de los haitianos que llevan 104 días frente al Ministerio de Trabajo en reclamo del pago de 15 millones de pesos .
Al menos ocho de los 112 ocupantes de la parte frontal del Ministerio de Trabajo están enfermos con la cara hinchada. Cuatro fueron llevados al hospital de la Policía, donde recibieron atenciones, pero su situación se agrava debido a que están bajo agua, sol y sereno.
Los enfermos no saben qué tienen y permanecen tirados en el pavimento. Los haitianos, sobre todo las mujeres, tienen que bañarse en un solar cercano porque no tienen donde realizar sus necesidades, por lo que están pensando en hacerlas en el lugar que ocupan.
Francisco Ogilo, vocero del grupo, dijo que gracias a la generosidad de algunos dominicanos no están peor porque cada día le dan agua, jugo, pan y otros alimentos. Destacó, además, el buen trato que les dispensan los policías enviados al lugar.
Deploró que de la embajada haitiana “ni una fundita de agua” le han llevado a pesar de que han acudido a sus oficinas en busca de apoyo. Dijo sentirse sin apoyo de las autoridades de su país que los han tratado con indiferencia.
Indicó que lo único que quieren es el pago de sus prestaciones por trabajos realizados a la empresa Coquera Real, de San Cristóbal, propiedad de Rafael Emilio Alonzo para quien han trabajado desde 1999.
“Nosotlo tamo esperando lo cualto para salimo de aquí, pelo sin los cualto ninguno se va de aquí, mejo que se molimo to de al flente del ministelio de trabajo, polque nosotlo no matao a nadie, no robá, nosotlo tamo gleclamando un delecho”, dijo Ogilo en su limitado español.
Reclamó de la ministra de Trabajo, Maritza Hernández, para que interponga sus buenos oficio como funcionaria competente ante un conflicto laboral, para que el señor Rafael Emilio Alonzo le pague los 15 millones de pesos que les adeuda porque todo el que se ganó su dinero, lo debe recibir aunque sea 20 pesos.
Pago de dinero
El vocero de los trabajadores haitianos dijo que no sabe si es que la ministra es familia o amigo de su expatrón porque no hace nada para resolver el problema y que si ella no le quiere reclamar al empresario que se los pague el Ministerio.
Insistió en que solo están esperando el pago de su dinero para irse del lugar.
Advirtió que para trasladarlos del lugar sin su dinero, que dice se ganaron con mucho trabajo, tendrán que matarlos a todos porque no se irán del Ministerio de Trabajo.
