El juego constituye un aspecto fundamental en la vida del niño. A través del él, éste expresa lo que piensa, quiere, necesita y siente en relación con el mundo que le rodea. Para que el juego sea un verdadero elemento de estimulación y no sólo un simple “pasatiempo”, es preciso conocer qué habilidades son susceptibles de desarrollo en cada momento evolutivo del niño.
En el mercado, la oferta de juguetes es tan grande y variada que es muy difícil decidirse por el más adecuado o el mejor para tu pequeño. ¿Qué se debe considerar entonces a la hora de elegir un juguete para un niño?
Desde hace un tiempo la demanda de juegos y juguetes didácticos ha ido aumentando, pues estos ayudan a estimular la creatividad y la imaginación del pequeño, mucho más que un juguete estandarizado, que únicamente se puede utilizar en una dirección. Además, el niño que se acostumbra a jugar con este tipo de juguetes va a llegar a la etapa escolar con un pensamiento más desarrollado y va a estar más familiarizado con las formas, los colores, los números y las letras.
Para los papás, implica más trabajo, pues tendrán que sentarse con el pequeño para explicarle, orientarle e inclusive jugar con él, pero esto permite que ese juego sea de mejor calidad, mucho más enriquecedor, y lo más importante es que va a ayudar a fortalecer la vinculación padre hijo.
Es fundamental tener en cuenta la edad de los niños antes de seleccionar el juguete, ya que la capacidad manipulativa de los bebés es limitada, ya que se relacionan con el mundo a través de la vista, el oído y el tacto. También es importante que el infante pueda elegir qué es lo que más les gusta, aunque a veces los padres piensan que no le va a gustar nada, ya que el niño solo está enloquecido con tal o cual juguete que vio en la televisión. Pero si se le ofrece otra opción interesante, sin duda lo aceptará y después no pedirán los otros tipos de juguetes.
Según la edad
Según los expertos, de 0 a 6 meses el niño necesita juguetes que le ayuden a descubrir su cuerpo y a distinguir diferentes texturas, formas y colores. Los sonajeros, móviles de cuna, muñecos de goma, mordedores y alfombras con actividades resultan ideales. De 7a 12 meses el bebé empieza a explorar los objetos y a reconocer voces. Pelotas, muñecos de trapo, juguetes sonoros, y andadores son los más recomendados. Los niños de 13 a 18 meses ya saben andar y reconocen las propiedades de los objetos. Los cubos para encajar y apilar, las bicicletas con ruedas y los cochecitos son los que los especialistas recomiendan. Así, de 19 a 24 meses los pequeños hablan y comprenden y empieza a descubrir su entorno. A esta edad, los coches, bicicletas, pizarras, pinturas, instrumentos musicales, muñecas y animalitos pueden estimular sus destrezas.
De 2 a 3 años de edad los infantes empiezan a sentir curiosidad por los nombres e imitan escenas familiares. Opta entonces por comprarles triciclos, palas, cubos, rompecabezas, pinturas, teléfonos y muñecas.
Ya de 3 a 5 años ellos empiezan a preguntar, a aprender canciones y a jugar con sus amigos/as. Bicicletas, pizarras, magnetófonos, cuentos, marionetas y muñecos articulados .De 6 a 8 saben sumar y restar, leer y escribir. Monopatines, coches teledirigidos, juegos manuales, de preguntas y de experimentos son los más indicados.
