Fernández valora la familia y los clubes

El presidente de la República, Leonel Fernández resaltó que el papel de la familia y de los clubes es importante para el avance de un país. El mandatario se refirió así al recibir una placa en el Desayuno del Club Mauricio Báez.

El presidente de la República, Leonel Fernández resaltó que el papel de la familia y de los clubes es importante para el avance de un país. El mandatario se refirió así al recibir una placa en el Desayuno del Club Mauricio Báez.

“Para enfrentar con eficacia los desafíos que tenemos, todo empieza en el hogar”, manifestó Fernández. “Tiene que ver con la familia, con la actitud de los padres, pero tiene que ver con los amigos que uno va cultivando a lo largo de la vida”.

El asesor del club, Leo Corporán, luego de las palabras del presidente del club, Saturnino Martínez, resaltó las condiciones humanas de Fernández, por los aportes al club. La ceremonia de este año, que conmemora el 48 aniversario, se hizo bajo el lema “marcando el rumbo”, amparado en cinco columnas: “independencia, educación, deporte, cultura y salud”.

Esos postes se fueron cosechando desde el nacimiento del club en septiembre de 1963, una entidad que el presidente aseguró le ayudó en su formación personal e intelectual. “Cuando no hay organizaciones, cuando no hay instituciones que puedan influir, que puedan moldear el pensamiento, que puedan incidir en el comportamiento que los individuos van teniendo, se generan las desviaciones”, dijo.

Reconoció al Mauricio Báez como una de las instituciones más prestigiosas del país. “Cuando un país se desvía, no hay futuro para nadie”, agregó.

El acto, que se realizó en la cancha de la institución, contó con la presencia de varios miembros del gabinete presidencial, empresarios y figuras del deporte.

“Mi vida está íntimamente ligada a este barrio”, dijo Fernández en un discurso de unos 15 minutos y luego de que se le entregara una placa en la que se lee, entre otras cosas, “dedicándoselo (el Desayuno de este año) al más insigne de los hijos de Villa Juana, el doctor Leonel Fernández”.

DEspués de 30 años. El presidente distinguió entre los invitados a un amigo, que en su infancia le enseñó a jugar baloncesto y resaltó que aprendió bien las técnicas recibidas de  “Delfín, a quien no veía hacía 30 años”.

Delfín Ramírez fue profesor de educación física por unos 30 años en el sistema escolar y en la UASD laboró por unos 10 más. Recordó a Fernández como un jugador que “tenía sus habilidades”.

Al final habló con el mandatario y luego preguntado por qué una persona que conoce al presidente con unos 12 años en el ejercicio presidencial no busca al mandatario. “No me gusta molestar”, dijo Delfín.

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