El exjefe de Operaciones de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), Francisco Antonio Hiraldo Guerrero, se negó a firmar voluntariamente su extradición y por ello, los jueces de la Suprema Corte de Justicia fijaron para el 14 de enero el requerimiento de extradición que solicitaron las autoridades norteamericanas.
El detenido, que llegó al máximo tribunal antes de las 8:00 de la mañana, fue llevado luego al despacho de la procuradora adjunta para asuntos de extradición, Gisela Cueto, y posteriormente a la quinta planta de la Suprema, en donde se reunió con los jueces de la Cámara de Consejo.
Fue en el encuentro donde el acusado por narcotráfico expresó que no firmaría voluntariamente su salida al país por asuntos judiciales. A su salida, ni Hiraldo Guerrero ni sus abogados quisieron ofrecer declaraciones a la prensa.
El acusado enfrenta cargos por asociación criminal con la red de narcotraficantes que dirigía el capitán Quirino Ernesto Paulino Castillo y otros grandes carteles de la región.
Hiraldo expresó ante los jueces “he decidido discutir la solicitud extradición para desmentir la infamia que pesa en mi nombre”.
En tanto, su abogado Ramón Pina Acevedo expresó a la corte “hemos decidido por el proceso de discutir la solicitud, ya que confiamos en los honorables jueces que componen esta sala”.
La audiencia fue fijada para las el 14 de enero del próximo año, a las 10:00 de la mañana.
