El auge de la criminalidad, del narcotráfico y de otras manifestaciones del crimen organizado en el país se debe a que la política anti-criminar del Estado está siendo manejada como un negocio, denunció el mayor general retirado Juan Tomás Taveras Rodríguez.
El también comunicador social considera que el gobierno carece de una estrategia bien definida, mediante la cual se pueda lograr una reducción de los altos niveles de la inseguridad.
“Mientras las autoridades dominicanas responsables de combatir el crimen solo se preocupen por sus interés particulares no hay posibilidad de lograr el retorno del sosiego a nuestro país”, afirmó Taveras Rodríguez.
El general retirado se expresó en esos términos al ser entrevistado por Nicolás Arias, Andrés Bonilla y Félix Franco en el matutino al tanto, que cada sábado y domingo se transmite por Megavisión Canal 43.
Dijo que la Policía Nacional, el Ministerio de Interior y Policía, el J-2 y otros organismos deben ser despolitizados para que puedan desarrollar una labor más eficiente y al margen de los intereses económicos de sus representantes.
Durante su participación en el espacio televisivo el mayor general retira de la Policía Nacional consideró que el tema de la inseguridad debe ser abordo desde una perspectiva más amplia y que involucre a expertos en la materia.
Entiende que la propuesta de desarmar a la población civil no es la garantía de solución a la problemática y puso como ejemplo el caso de Canadá que, a su juicio, es la nación con más armas en poder de la población y con menor tasa de homicidio.
De igual modo el general retirado y comunicador social definió la frontera con Haití como un negocio muy lucrativo, donde se benefician militares un indeterminado número de funcionarios del gobierno.
Afirmó que la captura en territorio dominicano de varios reclusos que escaparon de una cárcel en Haití demuestra que las autoridades nacionales no tienen interés en transparentar la franja divisoria.
Taveras Rodríguez dijo tener en su poder informes de organismos internacionales que demuestran que cerca de cuatro (4) millones de haitianos, entre legales e ilegales, residen en territorio nacional.
