Concluidas las elecciones del pasado 15 de mayo, el principal reto de las autoridades electas, los partidos políticos y las distintas fuerzas sociales es llegar a los acuerdos necesarios que permitan la gobernabilidad en el país. Sin embargo, las heridas que dejó el pasado proceso electoral, las demandas y las necesidades insatisfechas de la población, la limitada capacidad de respuesta del gobierno y los intereses políticos de los partidos de oposición, pueden complicar esa tarea al presidente Danilo Medina, que tiene la responsabilidad de guiar y lograr la gobernabilidad que requiere la nación.
¿Cómo se construye la gobernabilidad? El sociólogo y catedrático César Cuello lo explica así: “Se necesita transparencia en el ejercicio del poder, flexibilidad, participación, respeto a todas las partes que integran la gestión del Estado. La gobernabilidad está centrada en el respeto al otro, en escuchar”. Para eso, Medina tendrá que formar un gobierno que por lo menos cuente con la aceptación de los partidos de oposición, incluyendo los minoritarios, lo que por el camino que han tomado tras el resultado de las elecciones, luce difícil.
Los temas que podrían ser fuente de confrontación entre el gobierno y los actores políticos y sociales inician con la conformación de la nueva Junta Central Electoral y el Tribunal Superior Electoral (TSE), que los integrantes de ambos terminan su mandato el 16 de agosto próximo y han sido fuente de las protestas que se han escenificado tras el resultado de las elecciones pasadas. Igualmente, la aprobación de la ley de partidos y agrupaciones políticas y la reforma a la Ley Electoral.
También el aumento de salario y la asignación del 5% del presupuesto al sector salud que demanda el Colegio Médico Dominicano (CMD), los recursos que demandan los docentes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, una posible reforma fiscal, la inseguridad ciudadana y el bajo salario de los servidores del sector público y privado.
“La gobernabilidad podría verse afecta por las insatisfacciones de la sociedad, porque cuando uno abre los periódicos, encuentra que los temas que afectan a la gente, están ahí, no se han resuelto, y eso puede afectar más la gobernabilidad que los conflictos entre los partidos”, dijo.
El excandidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, condicionó la gobernabilidad a que el cambio que se haga en los miembros de la JCE y el TSE sea independiente. “Son condiciones imprescindibles, para nosotros en el PRM y otras fuerzas democráticas, para que se pueda lograr una real gobernabilidad en nuestro país”, advirtió en su discurso tras las elecciones del 15 de mayo.
“Usted que se impuso y que va a dirigir el Poder Ejecutivo tiene la obligación constitucional de escuchar y respetar a todos los dominicanos que no votaron por usted, así como a aquellos que decepcionados no asistieron a las urnas”, dijo en otra parte de su alocución.
El dirigente y miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Franklin Almeyda, ha advertido que “el triunfo del PLD podría tener pies de barro” ante la embestida que entiende tendrá la oposición contra el cuarto gobierno seguido de su partido, que encabeza Medina. Almeyda incluso condiciona la estabilidad del gobierno de Medina a la unidad interna del PLD.
“El PLD tiene que ser el sostén del gobierno que salga de las urnas. Debe manejar ese poder con mucha humildad y sencillez, con ninguna arrogancia porque cualquier cosa que se hace desde el Estado se ve siempre fuerte y arrogante”, sostuvo.
En un artículo que publicó en este diario el 23 de mayo, Almeyda alerta de que el gobierno de Medina podría tener “pies de barro” por las “cosas sucedidas”. “Las cosas sucedidas han puesto pies de barro a ese triunfo; no hemos sentido orgullo porque los conflictos y trapisondas nos han avergonzado”, sostuvo el dirigente peledeísta.
Contrario a Almeyda, Cuello dijo que es difícil que las diferencias internas que se puedan suscitar en el PLD afecten la gobernabilidad. “Aquí la mayoría de los conflictos se resuelven con poder y un conflicto interno en el PLD no creo que afecte la gobernabilidad porque el gobierno tiene suficientes recursos para mantener la estabilidad gubernamental, pero sí puede afectar la institucionalidad”, argumentó el sociólogo.
El jurista Eduardo Jorge Prats dirigente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) aliado al gobierno y al presidente Medina también ha advertido sobre la necesidad de garantizar la gobernabilidad en la próxima gestión de Medina en el denominado “gobierno compartido de unidad nacional” porque, desde la perspectiva de Jorge Prats, en los próximos cuatro años habrá cuestionamiento a la legitimidad del gobierno que resultó de las elecciones.
¿Triunfo del PLD y Medina garantizan la gobernabilidad?
El sociólogo César Cuello advierte que la alta votación de casi 62% que obtuvieron Medina y el PLD y que hayan logrado mayoría en el Congreso y los ayuntamientos, no es una garantía de gobernabilidad en el país. “En lo absoluto, la cantidad de votos que hayan obtenido es una garantía para la gobernabilidad en el país porque en este país hay más de 10 millones de habitantes y Danilo Medina ha ganado con 2 millones y pico, y eso no es garantía de gobernabilidad y aún entre los que votaron por él hay aspiraciones no satisfechas y hay expectativas que no ha llenado”, explicó el especialista.
Iglesia y empresarios
La situación post electoral que se suscitó en el país por las denuncias de la oposición por supuestas irregularidades en las elecciones, la Conferencia del Episcopado Dominicano y el Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) llamaron a mantener la paz y evitar la violencia en el país.
Sin embargo, los empresarios también acogen el informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) que recomienda al país aprobar cuanto antes la ley de partidos y agrupaciones políticas y la reforma a la Ley Electoral 275-97.
En tanto, el presidente de la organización de Industrias de la República Dominicana, Antonio Taveras Guzmán, sostuvo que –a partir de su segundo gobierno el presidente Medina está compelido a liderar los “cambios bajo un esquema de amplio consenso con las fuerzas sociales, políticas y económicas de la República Dominicana, porque hoy más que nunca está latente el riesgo de un salto al vacío” en el país.
Medina llamó a la unidad
Tras las elecciones del 15 de mayo, Medina, que ganó con más del 60% de los votos, dirigió un discurso a la nación en el que invitó a los opositores a ser parte del nuevo gobierno. “Aquí lo que se ha producido es una victoria del pueblo dominicano, y por eso yo extiendo mis manos a mis adversarios de esta campaña electoral, con todo el respeto que me merecen, porque ellos representan también una parte importante de la sociedad dominicana, y a partir de hoy lo que hay son dominicanos y dominicanas a los que queremos conducir por la ruta del progreso y el desarrollo”, dijo Medina.
Resultados de comicios unieron oposición
Seis partidos que no participaron aliados al PLD en las pasadas elecciones se unificaron en sus reclamos de supuestas irregularidades en las elecciones y se han mantenido unidos. Esos partidos son el Partido Revolucionario Moderno (PRM), Alianza País, Fuerza Nacional Progresista, Partido de Unidad Nacional, Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC) y Alianza por la Democracia. Al menos tres de esas organizaciones habían sido aliadas al PLD en distintos procesos electorales. Según Abinader, excandidato presidencial del PRM, el objetivo de Medina no era competir con él en las pasadas elecciones, sino con Juan Bosch y Leonel Fernández. La oposición también se ha quejado de que supuestamente el PLD apabulló durante la campaña electoral con el supuesto uso de los recursos del Estado y que fue una competencia desigual. Un ejemplo, es que el día 13, fecha escogida por el PRM para hacer su cierre de campaña, el PLD hizo una cadena nacional de medios de comunicación, lo que no permitió que las actividades del PRM fueran transmitidas por la mayoría de los canales de televisión.
