Guardia Nacional acude a Vermont

Washington. La Guardia Nacional quedó movilizada ayer en Vermont para llevar comida y agua en helicópteros a zonas que continúan anegadas por el huracán «Irene», que a su paso por EE.UU. causó las peores inundaciones en décadas en el noreste del pa

Washington. La Guardia Nacional quedó movilizada ayer en Vermont para llevar comida y agua en helicópteros a zonas que continúan anegadas por el huracán «Irene», que a su paso por EE.UU. causó las peores inundaciones en décadas en el noreste del país.

Las autoridades emplearon además vehículos todoterreno de la Guardia Nacional para llegar a pueblos en los que los caminos pudieran ser aceptables.

Aunque la alerta por «Irene» regía para la costa, en zonas tierra adentro de estados del noreste como Vermont, Nueva York y Nueva Jersey hay pequeñas poblaciones totalmente anegadas y devastadas, de acuerdo con las autoridades locales.

El gobernador de Vermont, Peter Shumlin, dijo a los medios que este estado, fronterizo con Canadá, ha sufrido las peores inundaciones del último siglo y que los daños en la infraestructura han sido «extraordinarios».

El director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por su sigla en inglés), Craig Fugate, viajó ayer a Vermont para supervisar las labores de rehabilitación de las áreas dañadas y la atención a los afectados.

Lo mismo hicieron la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, y el de Agricultura, Tom Vilsack, que preveían visitar primeramente Virginia y luego realizar un recorrido aéreo en Carolina del Norte, donde «Irene» tocó tierra el sábado como un huracán de categoría 1.

La compañía ferroviaria Amtrak reanudó ayer el servicio entre Nueva York y Boston, pero mantenía cancelado el que comunica a la Gran Manzana con Filadelfia por las inundaciones. Las cifras de muertos dejadas por «Irene» sobrepasa ya los cuarenta. También dejó a cinco millones de hogares y empresas sin electricidad, de los que tres millones esperaban ayer que se les restablezca el suministro.

Estiman daños por US$10 mil millones

Irene arrojó 28 centímetros de agua en Vermont y más de 33 en algunas partes de Nueva York, provocando grandes riadas. El Gobierno estadounidense ha señalado que las tareas de rescate y asistencia se prolongarán aún durante semanas tras una tormenta que ha dejado, según algunas consultoras, hasta 10,000 millones de dólares en daños materiales.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas