AHORA ES CUBA, de Pablo Neruda
Y luego fue la sangre y la ceniza.
Después quedaron las palmeras solas.
Cuba, mi amor, te amarraron al potro,
te cortaron la cara,
te apartaron las piernas de oro pálido,
te rompieron el sexo de granada,
te atravesaron con cuchillos,
te dividieron, te quemaron.
Por los valles de la dulzura
bajaron los exterminadores,
y en los altos mogotes la cimera
de tus hijos se perdió en la niebla,
pero allí fueron alcanzados
uno a uno hasta morir,
despedazados en el tormento
sin su tierra tibia de flores
que huía bajo sus plantas.
Cuba, mi amor, qué escalofrío
te sacudió de espuma la espuma,
hasta que te hiciste pureza,
soledad, silencio, espesura,
y los huesitos de tus hijos
se disputaron los cangrejos.
Aprovechando que los amigos cubanos de la Universidad de La Habana, específicamente de la “Cátedra de Estudios del Caribe Norman Girvan”, estarían en Puerto Príncipe, decidimos organizar una actividad en conjunto. Como el evento de la CORPUCA terminaba el viernes en la noche en Puerto Príncipe, ellos vendrían el domingo a Santo Domingo. Me solicitaron venir al país por vía terrestre para conocer la frontera. Fue una gran experiencia para ellos.
Como ellos tenían que regresar a Cuba, organizamos el seminario el lunes 13 de junio con el título: “CUBA Y REPÚBLICA DOMINICANA UNA MIRADA CONJUNTA AL CARIBE”. Decidimos hacer también alianza con FLACSO-RD, pues su director Iván Ogando es uno de los grandes conocedores de los temas caribeños. En la invitación que hicimos circular, explicábamos nuestra motivación:
Con el reciente restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre los Estados Unidos y Cuba, se perfila, en un futuro cercano, un proceso de apertura comercial con el posible levantamiento del Embargo. Esta situación tendrá sin duda un gran impacto en el futuro económico de la isla, en particular, y de la región, en general. Para muchos, la presencia de una Cuba sin el Embargo en los mercados del Caribe, representa una amenaza a sus propias economías; sin embargo, existen otros modelos que ven esa apertura como una oportunidad. El presente seminario, se inserta en ese contexto y busca abrir un diálogo de pares a manera de una mirada conjunta de ambas repúblicas hacia el Caribe.
Fueron definidos los objetivos del
seminario:
1.- Valorar los contextos económicos, sociales e institucionales actuales de Cuba y República Dominicana, enfatizando en la evaluación de sus relaciones bilaterales así como en la proyección de sus políticas exteriores hacia el Caribe.
2.- Proponer líneas de investigación y estudio que pudieran priorizarse en una primera etapa de trabajo conjunto a desarrollarse entre el segundo semestre de 2016 y fines del 2017.
3.- Analizar la viabilidad de organizar un segundo Taller como continuidad de este y que tentativamente pudiera realizarse en La Habana en diciembre de 2017.
Concebimos tres paneles:
I.- Cuba y República Dominicana:
Política, Sociedad y Economía
Política y Sociedad
Cuba: Jorge Mario Sánchez
República Dominicana: Bridget Wooding
Economía
Cuba: Marlen Sánchez
República Dominicana: Pavel Issa Contreras
El Segundo fue titulado de la siguiente manera: Las políticas exteriores de Cuba y República Dominicana en la actualidad
Relaciones con los Estados Unidos
Cuba: Dr. Antonio F. Romero G.
República Dominicana: Roberto Álvarez
Relaciones con los países del Caribe
Cuba: Dr. Antonio F. Romero G.
República Dominicana: Iván Ogando Lora
Relaciones con la Unión Europea
Cuba: Dr. Jorge Mario Sánchez
República Dominicana: Iván Ogando Lora
El tercer panel fue uno de los más interesantes: Cuba y República Dominicana. Balance de las relaciones bilaterales
Dra. Marlen Sánchez Gutiérrez, Cátedra de Estudios del Caribe “Norman Girvan”, Universidad de La Habana
Dr. Antonio F. Romero G. Cátedra de Estudios del Caribe “Norman Girvan”, Universidad de La Habana
Manuel García Arévalo, empresario e historiador dominicano
Rafael Brea, Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra
Los panelistas se esmeraron en presentar ponencias sustanciales y bien argumentadas, sobre todo porque cada uno no contaba con más de 20 minutos para exponer. Lo más interesante fueron las discusiones con el selecto público que participó en el evento. Algunos de los elementos claves de la reunión:
Si bien es cierto que todavía no se puede medir el impacto de la apertura en Cuba, no menos cierto es que se están dando señales contundentes de que ese país se ha colocado en la agenda internacional de las principales potencias, especialmente la de los Estados Unidos. República Dominicana pasará a un plano secundario en la agenda norteamericana.
Cuba nos lleva ventaja en materia de relaciones exteriores, pues tiene un cuerpo diplomático bien formado y activo. El de RD, con escasas excepciones, está integrado por personas que no tienen un compromiso con la política exterior. Sus nombramientos constituyen premios políticos. Hay personas jugando papeles claves sin la formación adecuada. Nuestro país debería colocar la agenda internacional como una de sus prioridades y apostar a la diplomacia de carrera, seleccionando un cuerpo diplomático formado y especializado en el tema.
En materia de productos de exportación, la RD y Cuba tienen grandes diferencias, pero muchas semejanzas. Ambos países son exportadores de ron y cigarros. Cuba nos lleva la delantera en ambos casos, aunque los productos dominicanos tienen buena acogida en el exterior. Sin embargo, la apertura ¿impactará aún más esas enormes diferencias? A juicio del economista Pavel Isa, que presentó una ponencia en el evento, nuestro país no tiene todavía que preocuparse, pues Cuba no representa todavía una fuerte competencia nuestra. Yo tengo mis dudas con la posición del amigo economista.
El gran reto de la República Dominicana es poder mantener la preferencia de ser el primer destino del Caribe con la apertura de Cuba. Decían los ponentes cubanos que después del mes de diciembre, momento en que se oficializan los vínculos con los Estados Unidos, ha aumentado muchísimo el turismo de playa. Afirmaban también que la presencia de los “visitantes” norteamericanos, porque no pueden todavía llamarlos “turistas”, ha sido impresionante y espectacular.
La inversión de capital extranjero también se ha dinamizado y aumentado de manera acelerada y sistemática. La construcción de hoteles para el turismo de playa se ha duplicado en muy poco tiempo.
Es muy temprano todavía para evaluar cómo nos impactará como país la apertura de Cuba. Nuestra amada República Dominicana debe trabajar arduamente de cara a ese nuevo competidor que se presenta en el horizonte. El Gobierno debe tomar todas las medidas que sean necesarias para que ese sitial que tiene el país, por lo menos en materia turística, no le sea arrebatado por falta de políticas.
La República Dominicana debe de estar vigilante del proceso cubano. La competencia está cerca, muy cerca.
