Provocadores quieren alterar la hasta ahora pacífica campaña electoral en el país. Varios actos han sido atacados a pedradas. Primero fue al hijo del presidente Leonel Fernández, Omar; luego, una caravana del gobernante, y el pasado viernes los recorridos de Hipólito Mejía y Margarita Cedeño.
Creemos que se trata de acciones aisladas de energúmenos, al margen de las direcciones de los partidos.
La seguridad del Estado debe reforzar la vigilancia y las acciones de inteligencia en las manifestaciones de campaña, para atrapar a quienes que osen intentar cualquier agresión y someterlos para que paguen por sus delitos.
No permitamos que estos bandidos alteren la campaña.