El nombre de Anderson Hernández se ha constituido en una especie de sinónimo de los Tigres del Licey en el béisbol otoño-invernal.“Antes de jugar béisbol profesional era liceísta. Me crie siendo fanático del Licey, gracias a Dios que en el draft caí aquí. No creo que haya muchos liceístas como yo”, dijo el jugador.
Recientemente Hernández fue el ganador de una encuesta realizada a través de las redes sociales para que los fanáticos eligieran al jugador que mejor representaba al equipo azul.
“No sabía que había ganado esa encuesta. Quiero agradecer a los fanáticos por darme ese apoyo y demostrarme ese cariño”, agregó el jugador que puede defender varias posiciones en el cuadro interior.
Aunque no ha podido establecerse como un jugador de todos los días en las Grandes Ligas, Hernández no tiene ninguna duda con relación a su capacidad como pelotero.
“El béisbol es muy complejo. Puedes ser bueno y no recibir la oportunidad. A veces caes en gracia en un equipo y puedes durar muchos años. Llegas a otro, juegas dos días y te sientas cuatro. A veces es cuestión de suerte. No porque seas malo. Sé lo que puedo hacer”, añadió.
Elogió la nueva camada de jóvenes jugadores que han ingresado a las filas de los Tigres, que encabezan la tabla de posiciones con una marca de 13 victorias y cuatro derrotas.
“Tenemos mucho talento joven y, aunque los peloteros tenemos un carácter un poco fuerte, escuchan los consejos, no son malcriados y siempre están intentando hacer lo mejor”, dijo Anderson Hernández.
Halton se despidió del Licey
El conjunto Tigres del Licey anunció la partida a Estados Unidos del jugador importado Sean Halton, con la posibilidad de que retorne para el equipo en el mes de diciembre.
El jardinero nativo Engel Beltré está en situación de día a día, luego de sufrir una lesión la noche del viernes; lo mismo que el receptor estadounidense Tuffy Gosewisch, quien está afectado de un virus gripal.
Jonathan Díaz: “Solo quiero jugar béisbol”
El campo corto Jonathan Díaz está motivado con la gran campaña que está teniendo en la pelota invernal dominicana al ponderar la oportunidad que ha recibido como un chance de seguir aprendiendo y mejorando su juego.
“Solo quiero jugar béisbol, trabajo duro para estar en las mejores condiciones y no descanso por lograr grandes cosas con el equipo”. Díaz no solo ha sido un jugador grande a la defensa, sino que también ha tenido un impresionante inicio a nivel ofensivo. Batea .373 (segundo en la Liga) con 17 anotadas, cuatro dobles, un jonrón, ocho remolcadas, 14 (segundo en la Liga) bases por bolas.
Muy interesante ha sido su presencia en bases con un porcentaje de .595, ha conectado de hit en 11 de los 16 partidos que ha visto acción.
