El castigo no es suficiente disuasivo contra la deshonestidad. La convicción de las personas sobre la honestidad juega un rol que algunos entendidos lo consideran más efectivo que cualquier temor de sanción. Esas corrientes llaman a enseñar la honestidad en su valor absoluto. (Soy deshonesta si robo dinero; también si tomo prestado un objeto sin valor que no devuelvo). Aparentemente, hay tendencia natural humana a ver deshonestidad en unas conductas y en otras no. La honestidad connota sociedades más eficaces; por algo admiramos la tradicionalmente reconocida a los japoneses. Aquí acusamos un grave problema de aplicación y efectividad de la ley, en parte por la débil valoración de la honestidad que, en promedio, hace el dominicano.
Honestidad
El castigo no es suficiente disuasivo contra la deshonestidad. La convicción de las personas sobre la honestidad juega un rol que algunos entendidos lo consideran más efectivo que cualquier temor de sanción. Esas corrientes llaman a enseñar la…