La tercera escogencia de Al Horford para el Juego de Estrellas de la NBA posee un enorme valor para el ala pívot dominicano. Es que llega en el justo momento y confirma que las dos cirugías a las que fue sometido en sus pectorales no han mermado su condición de astro en la exigente liga norteamericana.
El propio Horford, sin embargo, confesó que sí llegó a pensar lo contrario. “Hubo mucha incertidumbre con mi futuro”, afirmó durante una entrevista para elCaribe.
“Esta elección es gratificante porque no se imaginan todo lo que tuve que pasar para llegar a este momento, había mucha incertidumbre de si iba a poder regresar, de si iba a ser el mismo jugador y todas esas cosas, así que hoy me siento agradecido con Dios que me puso en esta situación de estar en este nivel”, agregó el dominicano.
El jugador de los Hawks de Atlanta se rompió el pectoral izquierdo en enero de 2012 y tuvo una similar lesión en el pectoral derecho el 26 de diciembre de 2013. Durante la campaña 2011-12 apenas jugó 11 partidos, pero regresó en la postemporada, mientras que en la contienda de 2013-14 solo participó en 29 choques y no estuvo en playoffs. El dominicano estará entre los reservistas del equipo de la Conferencia Este durante el clásico de mitad de temporada que será celebrado este domingo en el Madison Square Garden de Nueva York.
Horford apuntó que tuvo un verano muy limitado, tanto que no pudo entrenar como siempre habituaba, algo que atrasó su puesta a punto de cara a la temporada actual. “Cuando suceden lesiones como las mías uno siempre dura al menos 50 partidos para retomar el nivel y hasta a veces te cuesta una temporada completa”, explicó. “No empecé a practicar sino hasta octubre, por eso fue que me tomó tiempo encontrar el ritmo de nuevo”.
La lesión y posterior cirugía en el pectoral derecho de vez en cuando le molesta, según dijo, pero nada al nivel de tener que sentarse. Él dice que no ha habido necesidad de descanso porque “le he caído arriba a eso” y que nunca falta a las terapias de rigor.
Atlanta no es San Antonio
Horford sabe que sus Hawks están volando alto. Recientemente tuvieron una cadena de 19 ganados, incluido un récord histórico de 17-0 en enero, que dejó a todos hablando de la capacidad del equipo y del parecido a los cinco veces campeones San Antonio Spurs.
Pero Al cree que las comparaciones con los Spurs son demasiado y entiende que a su escuadra le falta bastante para llegar a los dominios de la tropa que dirige Gregg Popovich.
“Hay similitudes, pero somos dos equipos totalmente diferentes”, dijo. “Hay mucha similitud, pues los conceptos son iguales, pero estamos tratando de crear nuestra propia identidad. San Antonio es un equipo probado, ya ha ganado campeonatos, nosotros no hemos hecho nada todavía, pero aspiramos a este en ese tipo de nivel. Entendemos que nos toca seguir trabajando y desarrollándonos”, dijo sobre la comparación sobre su equipo y los actuales campeones de la liga.
Los Hawks de Mike Budenholzer, un ex asistente de Popovich en San Antonio, tienen marca de 42-10 (.808) y solo son superados por Golden State (.816), que cuenta con registro de 40-9.
Luego pensará en selección
El brillante desempeño de los Hawks es lo que tiene al jugador de 6-10 de estatura pensando en playoffs y en lo que puede suceder después de ahí. No en nada más. Eso incluye la selección dominicana de baloncesto, que tiene el compromiso de buscar una plaza a los Juegos Olímpicos de 2016 durante el torneo preolímpico de Las Américas en México.
“Ahora mismo mi enfoque está con mi equipo”, afirmó. “Nosotros llevamos ahora mismo una temporada muy buena. La selección, claro, después que termine la temporada sería algo que consideraría, pero ahora mismo mi prioridad es darle el cien por ciento de la atención a mi equipo”.
