Injerencista

Quién es el embajador de Estados Unidos en el país es un detalle importante. Su personalidad, apariencia, acciones, intervenciones públicas, pronunciamientos, etc., son aspectos del mayor interés nacional. El actual, James Brewster, es, para empezar, un caso a todas luces insólito: homosexual y casado con un hombre, una estampa de esta época. Eso dio ya de por sí bastante de qué hablar, como se recuerda. Ahora el representante estadounidense se gana la fama de embajador “injerencista”, en la línea de otros antecesores suyos, particularmente por sus críticas a la corrupción reinante en el país. Brewster podrá pecar de intervencionista, pero ¿podemos negar que la corrupción es un gran mal nuestro? ¿Hasta dónde nuestra ropa sucia merece lavarse exclusivamente en casa?