Seis excandidatos presidenciales de la oposición emplazaron ayer al presidente de la Junta Central Electoral (JCE) a hacer de público conocimiento las informaciones que dice disponer y que según él avalan que hubo “intentos reales” de hacer colapsar las elecciones.Los expostulantes que cuestionan el manejo de la JCE en el pasado proceso de votación exigieron a Roberto Rosario que “actúe con la responsabilidad que le impone su cargo y proceda a someter ante la justicia a los responsables de hechos de esa trascendencia, por demás, sancionados por la ley”.
Advirtieron que no reconocen los resultados que “intenten imponerse por la fuerza del poder”, por considerar que los mismos han sido anunciados en violación de la ley y que cuestionan, por tanto, la gobernabilidad democrática del país los próximos cuatro años.
Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno (PRM); Guillermo Moreno, de Alianza País; Soraya Aquino, del Partido de Unidad Nacional (PUN); Pelegrín Castillo, de la Fuerza Nacional Progresista (FNP); Minou Tavárez Mirabal, de Alianza por la Democracia (APD), y Elías Wessin Chávez, del Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC), ofrecieron una conferencia de prensa conjunta en el hotel Radisson, donde fue leído un documento en el que expresaron su rechazo categórico a la evaluación que hizo el jueves el presidente de la JCE sobre las elecciones, calificándolas de “libres, limpias y transparentes”.
Subrayaron que, por el contrario, las elecciones resultaron “de las más corruptas y peor organizadas que recuerde la historia democrática de la nación”.
“El discurso del presidente de la Junta lejos de ofrecer explicaciones de orden institucional orientadas a disipar las graves dudas que han afectado las elecciones recién transcurridas, estuvo matizado por preocupaciones e interpretaciones de orden personal que, en los hechos, aportan nuevos y decisivos elementos de prueba para ilegitimar el proceso”, dijeron en el informe que leyó Wessin Chávez.
Sostuvieron que en vez de asumir un rol institucional, Rosario “se parcializó de manera ostensible con el partido de gobierno intentando justificar de manera infructuosa su incapacidad para organizar un proceso electoral diáfano, ordenado, transparente y legítimo”.
Entienden los excandidatos que es “absurda y completamente inverosímil” la versión dada por Rosario en el sentido de que la culpa de los “graves problemas e irregularidades” suscitados en el escrutinio de los votos en los tres niveles de elección, recaiga sobre ellos.
Reiteraron el reclamo de que la Junta les entregue copias manuales que certifiquen un escrutinio “confiable” de los votos en todos los colegios electorales, y que en los lugares donde resultare imposible recuperarlas sea anulado el proceso y que se celebren nuevas elecciones.
“Rechazamos la reiterada defensa a ultranza que hace el presidente de la Junta de la tecnología contratada, cuando todo el país constató la magnitud de los problemas que se suscitaron a causa del desorden administrativo y las fallas estructurales de este sistema”, manifestaron.
Consideran “insólito” que la respuesta de Rosario “al delito electoral cometido por los funcionarios de los colegios electorales de no llenar actas de escrutinio”, haya sido el elogio.
Critican que no se haya referido a renunciantes
Los excandidatos rechazaron “el silencio” de Rosario sobre la supuesta renuncia de los tres mil auxiliares técnicos y personal de colegios que él mismo denunciara un día antes de las votaciones. “Ese grave y oscuro hecho, que sí pudo haber constituido un peligroso atentado contra las elecciones, no ameritó el más mínimo comentario de Roberto Rosario en su alocución, lo que hace que el pueblo tenga dudas más que razonables de que en realidad tales renuncias se produjeran”, dijeron.
