Cientos de personas de los diferentes barrios del Gran Santo Domingo hicieron ayer largas filas frente a la Fundación Joaquín Balaguer, ubicada en la avenida Máximo Gómez número 25, para recibir una caja con artículos comestibles para preparar en la cena de Nochebuena.En las diferentes filas había ancianos, no videntes y personas jóvenes que aguantaban desde empujones hasta insultos en procura de que “nadie le tomara el turno” para recibir las fundas rojas que contenían pollo, telera, aceite, arroz, habichuela, azúcar, chocolate, pica-pica, sazones, leche, avena, pollo, manzanas, dulces y vino, además de cien pesos en efectivo para el pasaje, según dijeron algunas de las personas en la fila.
Los dirigentes del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) fueron los que encabezaron la distribución de las fundas. Aunque los organizadores dijeron que la repartición inició después de las 7:00 de la mañana frente a la residencia donde vivió el finado líder reformista, Joaquín Balaguer, muchas personas madrugaron para obtener una de las fundas.
Algunos dijeron que llegaron al lugar desde las 4:00 de la madrugada desde sectores como Los Guaricanos, Sabana Perdida, Gualey, La Ciénaga, Guachupita, Simón Bolívar, San Carlos, Villa Duarte, entre otros barrios, para poder conseguir la dádiva. La multitud eufórica ocupó parte de la Máximo Gómez, dificultando el tránsito por esa importante vía.
“Está difícil venir aquí a buscar esta funda, pero es que es la única forma que una tiene de hacer alguito en la Nochebuena”, expresó Belkis Cecilia Mejía, una mujer de 50 años, residente en Los Guaricanos, que acudió al lugar junto a su esposo, un no vidente, para lograr obtener una de las raciones de alimentos. En situaciones parecidas a esta señora, había muchas personas en el lugar.
En la entrega de fundas estuvieron presentes el secretario general del PRSC, Ramón Rogelio Genao; el presidente de la Fundación, Rafael Bello Andino; el general retirado Luis M. Pérez Bello y Aníbal Páez, entre otros.
De acuerdo a Genao, en la actividad se entregaron 15 mil raciones y otras 35 mil en toda la geografía nacional, dando especial atención a los lugares que sufrieron los embates de las lluvias e inundaciones. La larga fila se extendía desde la avenida Simón Bolívar hasta la calle César Nicolás Penson.
