“La muerte de mis padres me dejó un vacío inmenso”

Verónica llego a la cita con un poco de premura, luego de haber cumplido con un compromiso previo; venía ataviada con un traje de color negro con un estilo discreto y elegante, complementado con un collar y aretes de perlas color crema.

Verónica llego a la cita con un poco de premura, luego de haber cumplido con un compromiso previo; venía ataviada con un traje de color negro con un estilo discreto y elegante, complementado con un collar y aretes de perlas color crema. Respiró profundo y luego externo una gentil sonrisa para disculparse.

A seguidas pasamos a una sala de reuniones donde la invitamos a tomar asiento, a lo que accedió con mucho gusto. Se inició una amena conversación, donde nos habló de diferentes etapas de su vida, pasando por el plano profesional, la experiencia de ser madre y su pasión por la lectura, la música clásica, la literatura, la cultura y las artes.

1. La Niñez: Bonitos recuerdos

Mi niñez fue muy buena, pues somos siete hermanos. Soy melliza con un varón que se llama Andrés Porfirio. Vivímos como la mayoría de los niños de los años 50, en una familia sin abundancia económica, pero con cosas esenciales que marcan a cualquier niño, como buenos libros para leer, música clásica siempre en el hogar, todos los juegos de la época y todos los pequeños castigos, además de muy buenos maestros para nuestra formación.

2. Mis Padres: Un ejemplo a seguir

Guillermo Sención, mi padre, fue un hombre de carácter muy fuerte en la crianza de sus hijos. Era un intelectual, los amigos y relacionados le decían La Biblia, porque aparentemente lo sabía todo. Tenía gusto por la música clásica y la costumbre de leer diariamente los clásicos universales, además, le encantaba la buena comida.

Monnalisa Villalona Frías, mi madre, era muy bien educada, con gusto por la poesía y la declamación.Tenía el hábito de escuchar buena música todos los días.

3. Mi formación cultural

La recibí de mis padres, así como la solidaridad y el siempre estar ayudando en alguna causa noble.

Otro motivo de orgullo es el tener un nieto de ocho años con gran sensibilidad para la música y la pintura, lo que le ha permitido obtener una beca en uno de los mejores colegios de Beverly, Massachussets , en los Estados Unidos.

4. Mi primer empleo

En la década de los 70, estudiando la carrera de Administración de Empresas en la Universidad Mundial de Puerto Rico, a través de una amiga dominicana inicié mi primer trabajo en la cadena de Mueblerías López, con el cargo de gerente de tienda.

A mi llegada a la República Dominicana en el año 1984, mi primer trabajo fue en las empresas de don Víctor Méndez Capellán, donde laboré por varios años. Hasta la fecha no he parado de trabajar un solo día.

5. Una gran ilusión

Me enamoré y me casé muy joven con Manuel Betancourt, con quien conviví durante 17 años. Él era un amante de los viajes y le gustaba vivir experiencias en otros países, lo que nos llevó a vivir en Puerto Rico y en los Estados Unidos, en las ciudades de Miami y Boston y en casi todo el territorio norteamericano.
El más importante logro de esa unión fue el nacimiento de mis dos hijos Manuel y Alexis, dos hermanos inseparables.

6. Ser madre: Un regalo de Dios

Mis dos hijos son el mejor regalo que he recibido de Dios, vivo muy pendiente de ellos y siempre hemos sido como los tres mosqueteros.

Ellos viven en los Estados Unidos. El mayor de los dos, Manuel, está casado con Verania Peña, es traductor legal en la corte de Boston y de Lawrence, en Massachussets y el más pequeño, Alexis, está casado con Fanny Hernández y es ejecutivo de la Toyota de Boston. Hablamos casi todos los días por la vía telefónica.

7. Un duro momento

La muerte de mi padre en el año 1994, fue aplastante. Nunca había imaginado que uno pudiese sentir un pesar tan grande, un vacío inmenso que sólo llena el recuerdo del buen tiempo vivido a su lado. Luego, en el año 2003, la muerte de mi madre, fue otro gran pesar, con el consuelo de que vivió 88 años.

8. Una travesura

En los años 60, invité a Gladys, una de mis hermanas, para ir detrás de una procesión en la celebración de Semana Santa, iniciamos en horas de la tarde nuestra caminata. Me parece que caminamos más de una hora, y luego, ninguna de las dos sabíamos adónde estábamos. Nos pusimos muy nerviosas y mi hermana, que era muy cobarde, comenzó a llorar de miedo, luego, buscamos personas a las que pedimos ayuda para regresar a la casa.
Al llegar al hogar, el castigo recibido fue peor que el susto que pasamos en la caminata por habernos ido sin permiso de mamá.

9. Mis amigos : Parte de mi vida

A lo largo de mis años he cultivado amistad con tantas personas de nuestro país y de otros que me parece que sería imposible para mí saber los amigos y amigas que tengo. Estos últimos años, con mi labor en Librería Cuesta, como presidenta de la Federación de Mujeres Empresarias y como miembro fundadora de la Fundación Vida sin Violencia, he podido aquilatar la importancia de la sociabilidad y la importancia de trabajar con miles de personas durante años.

10. Una gran enseñanza

Para mi vida fue muy importante la amistad de muchos años con el profesor Juan Bosch y con el Poeta Nacional Pedro Mir, con quienes compartí la Tertulia Literaria que yo organizaba junto a mi madre en el Hostal Palacio Nicolás de Ovando, en la Ciudad Colonial. Con ellos aprendí a dar todo a cambio de nada. En esas reuniones lo esencial era compartir poemas, opiniones, historias, lecturas y canciones, de manera amistosa, respetuosa, y con gran sentido humano y gran sentido solidario.

Esas horas no tienen ningún precio, solo se pagan con el recuerdo a esos amigos y el compromiso de seguir su ejemplo.

Amante del arte y la buena literatura

Durante sus 20 años de experiencia laboral ha desempeñado cargos en el área de turismo, en la agencia de viajes de las empresas Vimenca, para luego pasar a administrar el Hostal Palacio Nicolás de Ovando, por diez años.

Además, ha ocupado las funciones de asesora adjunta de la Subsecretaría de Estado de Educación; encargada de los Asuntos Culturales de la SEEC y encargada de las Jornadas Culturales de la Subsecretaría de Estado de Educación y Cultura de la SEEC. Se desempeñó por varios años como asesora de Asuntos Culturales del Ayuntamiento del D.N.

En la actualidad, se desempeña como presidenta de la Federación Nacional de Mujeres Empresarias Dominico-Internacional (FEM) es, además, la encargada de Asuntos Culturales de la Librería Cuesta y del Forum Pedro Mir.

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