Santiago. Las lluvias registradas durante todo el mes de diciembre no han logrado mejorar los niveles de los embalses Tavera-Bao que, por el contrario, han ido en descenso.
Mientras, se agudiza el servicio en comunidades de la zona sur debido a la salida de un transformador que permite ofrecer 25 millones de galones de agua por día. Las autoridades de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) informaron que las lluvias registradas en Santiago, La Vega, Bonao y otros puntos del Cibao no han aportado nada para mejorar a Tavera que en el día de ayer se encontraba en 318.85 metros sobre el nivel del mar. En los últimos días ha bajado 25 centímetros. La esperanza es que pueda llover en la cordillera Central, donde nace la cuenca del río Yaque del Norte para abastecer dichos embalses.
Crisis se agudiza
Con relación al transformador pedido a los Estados Unidos para solucionar la crisis de agua, la Coraasan dijo que aún no ha llegado, mientras los moradores en las comunidades afectadas advierten que se agudiza la crisis del servicio. A inicio del mes de diciembre el director del organismo estatal, Silvio Durán, advirtió que por la salida del transformador las comunidades de la zona sur podrían permanecer 17 días sin agua. En el día de ayer la llegada de un camión a la comunidad Villa Liberación terminó en protesta y la queja de sus moradores.
José Peña, uno de los manifestantes, dijo que llevan ya un mes y cinco días sin el servicio. “Si no nos dan agua con regularidad, vamos a ir a la Coraasan”, manifestó. Los sectores más afectados son el centro de la ciudad y los barrios de la margen oriental del río Yaque del Norte, como Bella Vista, Reparto Peralta, La Herradura, Barrio Nuevo, La Herradura, Tolentino, Villa Liberación, La Otra Banda, Pastor y La Yagüita de Pastor, Corona Plaza, entre otros.
La presa Tavera-Bao sigue en niveles bajos
A pesar de la promesa de solucionar el problema, este se ha extendido por más días de los prometidos por las autoridades que puso plazo de 17 días, los que ya pasaron y la pieza aún no llega al país. Aunque las lluvias se mantienen en sectores de la provincia, no ha sido así hacía la cordillera Central, donde nacen los ríos, por lo que persiste la escasez y los problemas de suministro.
