Santiago. En la lucha por salvar la vida de su hijo, Irina Santiago tuvo que recurrir a todo tipo de actividad para recaudar los 31 mil dólares que se requieren para someterlo a una operación de corazón abierto.Para recaudar la citada suma de dinero, Irina Santiago vendió pastelitos, salchichas y refrescos; organizó giras a la playa, vendió ropa y realizó una jornada recaudatoria de fondos. La ardua labor rindió sus frutos y muchos ciudadanos se sumaron a la causa y la ayudaron a juntar 31 mil dólares.
Tras lograr la meta, el niño Kendry Ureña Santiago viajará este viernes junto a su madre, hacia Miami, donde será intervenido la próxima semana en el hospital memorial Jackson.
Dentro de las ayudas recibidas, la más reciente fue de una mujer que no quiso identificarse, quien depositó en la cuenta del bebé de siete meses, la suma de cinco mil dólares. Otra de las ayudas provino del Voluntariado Jesús con los Niños que pagó el costo de los vuelos para que viaje hacia los Estados Unidos.
Colaboración
En varias ocasiones, el diario elCaribe publicó las dificultades de salud de Kendry, quien debía ser intervenido a más tardar en octubre de este año, pues los médicos que practicarían la intervención informaron que debía hacerse antes que cumpliera los seis meses. Sus vecinos del barrio La Muñeca, en el sector Baracoa, se sumaron a la causa y desde ya comenzarán una cadena de oraciones para que la intervención salga bien.
“Quiero darle mil gracias a todos los que, de una forma u otra, ayudaron a lograr que sea una realidad la cirugía de corazón abierto de Kendry. A todos, amigos, familiares y a los que sin conocernos nos ayudaron a lograr todo esto, ya sea con sus oraciones o contribuciones, que Dios los colme de bendiciones hoy y siempre, nosotros siempre estaremos agradecidos”, expresó Irina.
Colaboración fue clave para lograrlo
Irina Santiago dijo que aún recibe decena de llamadas de todo el país y del extranjero de parte de personas que se interesan en el caso y que preguntan si ya recaudó el dinero requerido. Hace dos meses que Irina inició una campaña para recaudar los 31 mil dólares que se requerían para la operación de su hijo. Ahora espera que Dios y los médicos “hagan la obra” .
