Es un filme que persigue encantar, primero al explicar ‘científicamente’ los poderes de Superman y darle una lógica creíble al hecho de poder volar y tener una fortaleza física de acero. Lo que se agradece. Así es como conocemos que la civilización originaria de este “hombre de acero” existe hace decenas de miles de años.
Que sus habitantes viajan por el espacio hace miles de años. Que la presión atmosférica de Krypton era 4 veces mayor que la de la Tierra y que no era apto para la vida humana. Una vez llega a la Tierra, Supermán comienza a obtener poderes que se van desarrollando al pasar del tiempo, entre ellos que consigue volar gracias a los efectos del sol amarillo. Pero también en lo cultural él es diferente y tiene que adaptarse, por ejemplo, a costumbres religiosas (gringas) y leyes de un país. Una sutil alineación ideológica chauvinista norteamericana.
El guión es reflejo del estilo muy particular de Christopher Nolan: sus personajes protagónicos son bondadosos y aparentan ingenuidad. Pero la dirección es de alto nivel reflejando el porqué se usó a este director y no otro: porque filma escenas de acción y combates físicos milimétricamente preestablecidas con gran destreza y singularidad. Muy adecuadas las excelentes elipsis (el montaje después de la caída de la nave es degustable) así como escenas que buscan emocionar mediante el uso de flashbacks. Deja ver una estrategia narrativa bastante clara cuando aborda la historia desde ese peculiar punto de vista de lógica de los acontecimientos presentando el causa y efecto en la misma escena, siempre mostrando la condición humana en la reacción de los personajes. La creación del villano Zod es coherente con la historia, expone al militar ofensivo y bárbaro en extremo, al tiempo que muestra los motivos de tanta mordacidad.
HHHH Dirección: : Zack Snyder Guión: :Christopher Nolan y David S. Goyer. Elenco protagónico: Henry Cavill, Amy Adams y Michael Shannon Género: Superhéroes. Año: 2013. País: Estados Unidos Duración: 143 minutos
