La Marina de Guerra y la Defensa Civil levantaron la búsqueda de náufragos ayer a las 3:00 de la tarde, sin encontrar víctimas. La frustración del viaje ilegal hacia Puerto Rico que un grupo de 28 personas pretendía emprender el miércoles desde las costas de La Altagracia fue una afortunada casualidad o “chepa” de la Marina de Guerra.
La embarcación con 16 hombres y 12 mujeres ya había dejado tierra, y su capitán estaba listo para buscar aguas adentro. Pero en ese preciso instante, a las 6:30 de la tarde, apareció el bote de la Marina que habitualmente traslada a dos militares desde el punto de vigilancia de la playa de La Vacama hasta el puesto de la zona conocida como Punta de Coco, a unos 42 kilómetros de distancia de Miches.
Asustados, y con la creencia de que su plan estaba descubierto, los viajeros ilegales (3 de ellos haitianos) giraron la yola hacia tierra, pero, en la rapidez, chocaron contra los arrecifes. Entonces el intento de emigración se convirtió en naufragio, y casi en tragedia.
“Cada vez que aquí hay problemas nosotros participamos directamente, porque la Marina confía mucho en nosotros. Aquí la Marina no está equipada. Nos llaman de una vez a nosotros y hacemos el operativo en conjunto”, dijo Oscar Zorrilla, director de la Defensa Civil en la región, minutos después de levantar el operativo de búsqueda de náufragos. Zorrilla asegura que no se encontró ninguna víctima mortal. Piensa que si alguno de los viajeros escapó de la acción de rescate, lo hizo entre los matorrales cercanos.
El punto específico del evento se llama La Tranquera. De allí fueron trasladadas hacia el centro médico de Laguna Nisibón seis personas deshidratadas y con golpes leves, que posteriormente pasaron a la Base Naval de Santo Domingo, junto a los demás participantes.
Según un reporte oficial, la embarcación o yola “Bahía Gracia” salió desde la boca del río Yuma hacia Punta Cana, con el plan de trasladar un total de 48 personas. Hasta el momento los responsables de organizar la acción no han sido identificados.
Los tres haitianos rescatados se identifican como Clarisse Vásquez, de 25 años; Nairobi Jean, de 22, y Evelyn Joseph, de 23. Dicen que pagaron US$2,000 a dirigentes de la travesía.
