Un posible acuerdo se haría con la firma de testigos de ambos sectores, además de una representación de la Iglesia católica.Julio Maríñez sostuvo ayer que Miguel Vargas y toda la dirección del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) tienen una posición de apertura total al diálogo para que la unidad se dé en un 100 por ciento en el partido blanco, pero aclaró que una posible amnistía a favor de Hipólito Mejía y otros sancionados “es un tema que no se negociará”.
“Apertura para todo menos los que han sido sancionados porque la disciplina y la democracia son un matrimonio en el partido que no se negociará. La disciplina no se negociará y hay una serie de personas que todavía están ladrándole a la luna con ese tema de creerse que van a seguir haciendo vagabunderías”, expresó Maríñez, cuestionado sobre si un acuerdo en el PRD incluiría levantar las sanciones a los expulsados y suspendidos. Maríñez afirmó que entre los temas que han consensuado con el sector disidente en el PRD figuran la convención escalonada que iniciará en febrero del 2014 y la escogencia de la comisión organizadora de la convención.
Siguen trabajando por acuerdo
El dirigente perredeísta Tony Peña Guaba, que junto con Eligio Jáquez y Guido Gómez Mazara encabezan las negociaciones, dijo que aún no hay fecha para anunciar al país el acuerdo que se discute entre las partes en conflicto en el PRD, pero garantizó que será esta semana. Dijo que además de la Iglesia, las partes que rubriquen buscarán testigos.
Explicó que los puntos que se discuten en este momento es lo relativo a la cantidad de miembros que tendería cada uno de los sectores en la comisión organizadora de la convención. Especificó que el tema de la amnistía sigue siendo uno de los más conflictivos para lograr el acuerdo.
Por el lado de Miguel Vargas forman parte de las conversaciones Peggy Cabral y de Hipólito Mejía, Ana María Acevedo y César Sánchez.
