Los siguientes cinco mitos fueron desaprobados por profesionales nutricionistas, quienes sacan al descubierto sus malas jugadas, para que obtengas los mejores resultados.
Mito: Se quema más grasa cuando se tiene el estómago vacío
Realidad: Nunca esperes el milagro de que la grasa corporal se derrita. Al hacer ejercicios se queman grasas y carbohidratos. Estudios han demostrado que ejercitarse con el estómago vacío quema más calorías de grasa que cuando se trabaja por una o dos horas, pero en total se queman aproximadamente la misma cantidad.
Mito: Hacer abdominales elimina la barriga
Realidad: Eso es una afirmación totalmente falsa. Para eliminar la pancita que nos molesta es necesario hacer ejercicios aeróbicos, que disminuyen la grasa abdominal y permite que los “cuadritos” salgan a relucir. Al ejercitar los músculos, éstos aumentan el volumen, pero no quiere decir que se quite la grasa que hay por encima.
Mito: Cuando duelen los abdominales es porque están funcionando
Realidad: En el gimnasio no siempre el dolor es beneficioso, muchas veces puede que los estés haciendo incorrectamente, puede ser perjudicial y propenso a una lesión. Por otro lado, hay ejercicios como las flexiones donde se mantiene una correcta postura, por lo que el músculo puede estar trabajando correctamente y apenas te das cuenta.
Mito: Usar plástico o fajas para sudar reducen el abdomen
Realidad: ¡Muy falso! Sudar sólo te hace perder líquido y nutrientes, lo que provoca la deshidratación. Esto es sumamente importante a la hora de entrenar, ya que puede producir efectos negativos en tu salud. Mejor dedícale unos 40 minutos a los ejercicios cardiovasculares y máquinas aeróbicas y conseguirás tu anhelado abdomen plano.