Los robos y asaltos a cualquier hora del día hacen que el sector La Lotería sea cada vez menos seguro y sus moradores pidieron cambiar la dotación del destacamento policial al que calificaron como un “peaje”.Los residentes se quejaron de los constantes robos y asaltos de que han sido víctimas por parte de malhechores en el barrio ubicado en el kilómetro ocho y medio de la carretera Sánchez. Explicaron que después de las 7:00 de la noche prefieren no estar en las calles para evitar ser asaltados, aunque los antisociales cometen sus fechorías sin importar la hora.
Varios de los residentes, quienes prefirieron no decir sus nombres por temor, denunciaron que el destacamento de la zona, al cual le llamaron “peaje”, no está haciendo un buen trabajo, ya que cuando acuden a poner las denuncias no les hacen caso y no patrullan la zona.
Denuncias
“Los ladrones se han metido a robar en mi casa dos veces. Me robaron cinco mil dólares, una laptop, dos bombas de agua y una cámara de video, en la madrugada mientras todos dormíamos”, explicó una de las residentes.
La inseguridad que afecta al sector se ve reflejada en las verjas que tienen los colmados y otros negocios, ya que, según explicaron sus dueños, no les quedó otra alternativa que cercar sus negocios porque han sido víctimas de robos en varias ocasiones y le han llevado miles de pesos. Denunciaron que un sujeto, conocido como “La Muerte”, tiene toda la zona con el “grito al cielo” y, de acuerdo con reportes, es el cabecilla de las bandas que cometen los asaltos y robos.
Explicaron que un grupo de delincuentes se reúnen en una casa abandonada, ubicada en la calle Segunda número 14, cuyo propietario se desconoce.
Otra de las afectadas, la cual tampoco quiso decir su nombre, sostuvo que “para entrar a mi negocio los ladrones rompieron las persianas con mandarrias y quitaron las verjas, pero gracias a un vecino que los espantó, no pudieron penetrar y llevarse mis pertenencias”.
Aseguraron que la Policía conoce quienes son los responsables de tantos robos, pero cuando hacen redadas apresan a los jóvenes “serios”del barrio y dejan en libertad a los “tigres y ladrones”.
La situación es tal que los “deliverys” sienten temor de entrar a llevar pedidos al sector, ya que muchos han sido víctimas de asaltos por parte de los delincuentes que los abordan para quitarles el dinero e incluso las mercancías y el motor.
Confesaron que sienten miedo de ir al destacamento policial a presentar las denuncias por temor a represalias por parte de los delincuentes, quienes, aseguran, están confabulados y tienen la protección de los agentes.
Ante esa situación, residentes pidieron a las autoridades que intervengan el sector y que cambien a los agentes asignados en el destacamento debido a que no se sienten seguros ni encerrados en sus casas.
