Debbie Reynolds, la alegre actriz que cantó y bailó con Gene Kelly en “Singin’ in the Rain” de 1952 y fue nominada al Oscar como la indomable heroína de “The Unsinkable Molly Brown”, ha muerto.Su hijo Todd Fisher confirmó que Reynolds falleció el miércoles, un día después del deceso de su hija, Carrie Fisher, a los 60 años. “Ahora está con Carrie y todos tenemos roto el corazón”, dijo Fisher desde el Centro Médico Cedars-Sinai, adonde su madre fue trasladada de emergencia durante el día. Indicó que el estrés por la muerte de Carrie “fue demasiado” para Reynolds.
Su hijo Todd Fisher confirmó que Reynolds falleció el miércoles, un día después del deceso de su hija, Carrie Fisher, a los 60 años. Indicó que el estrés por la muerte de Carrie “fue demasiado” para Reynolds. Reynolds disfrutó la cima del éxito en el espectáculo, pero también tuvo que soportar los abismos de la tragedia personal y la traición. Perdió a un esposo que la dejó por Elizabeth Taylor y otros dos maridos le quitaron millones de dólares.
Fisher, que halló la fama perdurable en el papel de la princesa Leia en “Star Wars”, tuvo problemas de adicción y salud mental gran parte de su vida y murió en diciembre de 2016 tras sentirse mal en un avión y ser hospitalizada. Reynolds y Fisher estuvieron disgustadas por años, pero se habían reconciliado hacia el final de la vida de la hija.
En el cine Reynolds ya era una superestrella desde muy joven. Tras dos papeles menores en Warner Bros. y tres de reparto en MGM, el jefe del estudio Louis B. Mayer la eligió para “Singin’ in the Rain”, a pesar de las objeciones de Kelly, quien era su compañero de reparto y codirector.