Con la proyección de la película de animación “Chico y Rita”, la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode) clausura su muestra cinematográfica.Al Festival de Cine Global Dominicano (DRGFF, por sus siglas en inglés) se le hizo difícil tener en su cartelera de estrellas al eminente director Fernando Trueba. Primero, porque el ganador de premios Oscar y Goya se resiste a usar celular para poderlo contactar, y, en segundo lugar, su más reciente cinta aún no estaba lista. La presencia de esta luminaria del cine español estaba en veremos, su nombre no se había manejado con seguridad en los medios.
Finalmente, sí se pudo. Y, aunque en un principio Trueba era la carta de apertura de la muestra, la clausura del evento cinematográfico hizo honor a lo que se denomina cerrar con broche de oro.
Hace cuatro años, Trueba (“Sé infiel y no mires con quién”) logró una nominación al Oscar como Mejor documental y un premio Goya al Mejor sonido por “Calle 54”, un minucioso trabajo de investigación en el que rindió homenaje a famosas figuras del Latin Jazz como Michael Camilo, Paquito D’Rivera, Bebo Valdés, Chucho Valdés, Tito Puente y Gato Barbieri, entre otros.
Una propuesta en la que contó con la coproducción del fallecido músico dominicano Mario Rivera. “Para mí, uno de los grandes jazzista de Nueva York… era más que un maestro”, recordó Trueba en un conversatorio en el Teatro Nacional Eduardo Brito.
“Ustedes tenéis grandes músicos, lo único que podéis, porque los músicos son tesoros de la cultura mundial, es exhortarles que apoyéis la música buena y no la mala”, dijo en medio de los insistentes aplausos que figuras como Trueba pueden provocar.
Un trabajo serio
Aparte de su envidiable trayectoria, el recuerdo de la cinta “Calle 54” fue motivo para que algunos amantes del séptimo arte acudieran a la presentación de “Chico y Rita”, una nueva referencia del trabajo serio del ex presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, en la que rinde homenaje a la música cubana.
Ambientada en las ciudades de La Habana, París y Nueva York, “Chico y Rita” ganó el Premio Goya, como Mejor película de animación. También fue seleccionada como Mejor película en el Festival Internacional de Animación de Holanda (HAFF 2010) y recibió el Premio Cineuropa 2010, en el Festival de Cinema Europeen des Arcs.
“Chico y Rita” no narra la historia de nadie en particular, son todos los músicos cubanos, aclara ante las interrogantes de los que disfrutaron del filme. “De una forma hay cosas de unos y de otros, cosas inventadas. Es mi carta de amor hacia ellos, a la música que han hecho, a su vida, a todas las cosas tan bonitas de la música, cuando Cuba y Nueva York eran una misma cosa”, reveló Trueba.
Músicos, pero también actores, directores, escritores -como su gran amigo Guillermo Cabrera Infante, autor de la novela “Tres tristes tigres”, obra en la que Trueba descubrió las noches de La Habana de los años 50- le inspiraron en esta historia del pianista Chico y de la cantante Rita, “dos personalidades volcánicas que protagonizan una destructiva relación sentimental”.
Hay mucho en esta película de homenaje a todo ese mundo y también a su “amistad maravillosa” con el gran pianista cubano Bebo Valdés, que inició cuando hizo “Calle 54”, dijo. Otra de las claves para que dirigiera un proyecto como “Chico y Rita” fue el deseo de trabajar con Javier Mariscal, “un grandísimo diseñador y productor, del que siempre he admirado mucho su trabajo”.
Chico y Rita es una película de animación que contó en un principio con actores, para que las actuaciones sirvieran como guía en el trabajo de los animadores.
“Mi pregunta era cómo conseguir que todos los animadores estén haciendo lo que tú quieres, la manera de hacerlo era trabajar con actores”, sostuvo Trueba. Y sin duda, al final ha conseguido recrear un mundo completamente maravilloso y emocionante.
Varias locaciones para una historia de amor
“Chico y Rita” narra la intensa historia de amor que protagonizan Chico, un pianista pobre, y Rita, una sensual cantante a la que éste conoce por casualidad una noche de 1948 en el cabaré Tropicana, en La Habana.
La apasionada relación entre el pianista y la cantante, llena de anhelos y dolor, se extiende por varias décadas y traslada al espectador a diversos escenarios en Nueva York, París, Hollywood y Las Vegas.
Fernando Trueba, ganador de un Óscar y nueve premios Goya con “Belle Époque” (1992) y otros siete Goya con “La niña de tus hojos” (1998)entiende que también es un homenaje a la música cubana, ya que la banda sonora cuenta con piezas interpretadas por leyendas del jazz como Nat King Cole, Dizzy Gillespie, Israel “Cachao” López, Thelonius Monk, Charlie Parker, Chano Pozo y Tito Puente, entre otros.
