Novak Djokovic estaba disfrutando de un paseo en su duelo por la primera ronda del Abierto de Australia, así que decidió probar algo nuevo y empezó a subir a la red. Como casi todo lo que hace últimamente en la cancha, la estrategia le salió de maravillas. El serbio arrolló ayer 6-2, 6-0, 6-0 al italiano Paolo Lorenzi para avanzar a la segunda ronda, lo mismo que hizo la estadounidense Serena Williams en el último partido de la jornada.
Djokovic intenta sumarse a Rod Laver, Pete Sampras, Roger Federer y Rafael Nadal como los únicos tenistas que han ganado tres títulos consecuvitos de Grand Slam en la era de los Abiertos.
Williams comenzó la búsqueda de su sexto título del reputado Abierto de Australia en un partido que culminó cuando ya era miércoles por la mañana.
La norteamericana no dio señales de sufrir secuelas de una lesión de tobillo que la obligó a retirarse de un torneo hace dos semanas y se movió bien en su victoria 6-3, 6-2 sobre la austríaca Tamira Paszek.
