obispos. Los obispos de distintas diócesis del país consideran que el proyecto de Ley de Naturalización sometido por el Poder Ejecutivo trae tranquilidad y sosiego al país.
Los obispos de las diócesis de Santiago, San Pedro de Macorís y La Altagracia, respaldaron el proyecto de Ley de Naturalización y Regularización Migratoria y reclamaron al Senado darle el mismo tratamiento que la Cámara de Diputados, donde fue aprobado de urgencia y a unanimidad en dos lecturas consecutivas.
Monseñores Ramón Benito de la Rosa y Carpio, de Santiago; Francisco Ozoria, de San Pedro, y Nicanor Peña Rodríguez, de La Altagracia, felicitaron al presidente Danilo Medina por esta propuesta legislativa con la que resuelve un gran problema de manera legal y humanitaria, con apego a la Constitución y a la sentencia 168-13 emitida por el Tribunal Constitucional.
En el mismo tenor se pronunció el obispo de la diócesis de San Juan de la Maguana y presidente de Caritas Dominicana, monseñor José Grullón Estrella, quien dijo que se trata de una acción prudente y equilibrada.
Los religiosos se refirieron al tema al ser entrevistados por separado y pidieron a los senadores aprobarlo tal y como le fue enviado.
Asimismo, celebraron que la pieza legislativa fuera el fruto del consenso entre los distintos sectores del país, incluidos el religioso, el empresariado y los partidos políticos.
Solución humana
De la Rosa y Carpio dijo que el presidente Medina ha dado un paso muy importante para solucionar un problema humano con apego a la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional.
Indicó que está complacido con la actitud asumida por el mandatario de consultar a la sociedad civil y a los partidos políticos para consensuar la pieza legislativa.
En tanto que monseñor Francisco Ozoria valoró los alcances que, desde el punto de vista humanitario, social y económico, tiene el proyecto de ley que regulariza a los hijos de extranjeros nacidos en territorio dominicano.
Mientras que el obispo de Higüey, provincia La Altagracia, destacó que el proyecto de naturalización no contradice la ley ni violenta la Constitución, por lo que se trata de una acción prudente y equilibrada. “Yo creo que el problema se ha manejado de una manera humanitaria, que es lo que se pretendía, que fuera algo que tuviera en cuenta a las personas sin distinción de clase, raza y nacionalidad”, expuso monseñor Nicanor Peña Rodríguez.
Proyecto está acorde con planteamiento de Iglesia
Los obispos consideraron que el proyecto de Ley de Naturalización está acorde con el planteamiento que ha hecho público la Conferencia del Episcopado Dominicano, relativo a la regulación de extranjería en el país. Afirmaron que la iniciativa legislativa lleva tranquilidad y sosiego a los ciudadanos de ascendencia haitiana que viven en el país al igual que a los distintos sectores de la vida nacional, incluyendo a los productores y empresarios.
