La Red Interamericana de Competitividad (RIAC) reunida en esta capital emitió este miércoles una declaración conjunta, la primera en su historia, en la cual se compromete a promover una educación de alta calidad que considera clave para mejorar la competitividad, los valores y el desarrollo de sus países miembros.
En el «Consenso de Santo Domingo» se compromete también a fortalecer el establecimiento de instituciones efectivas, responsables de promover junto a las existentes la competitividad de corto y largo plazos con participación directa del sector público-privado, y de otros actores relevantes.
En su reunión, la Red discutió el panorama de la competitividad regional, intercambió experiencias y mejores prácticas y consideró las reformas y políticas públicas necesarias para que las economías de sus países miembros sean más productivas, competitivas, prósperas y equitativas.
Esta es la primera declaración conjunta que logra la RIAC, la cual “representa un hito para la organización”, señaló Andrés van der Horst Álvarez, quien encabezó la reunión en su calidad de presidente pro-témpore del organismo regional.
Van der Horst es el Director Ejecutivo del Consejo Nacional de Competitividad, institución cabeza del montaje del V Foro de Competitividad de las Américas, cuyo encuentro regional inició este miércoles aquí.
El «Consenso de Santo Domingo», de diez puntos, incluye la energía y el emprendedurismo, sobre los cuales la RIAC también escuchó propuestas de los representantes de los 31 países participantes.
Acordaron promover un marco institucional y regulatorio estable y eficiente para los negocios y la inversión, a través de la transparencia en la gestión gubernamental. Asimismo, fortalecer del estado de derecho, impulsar la competencia en los mercados y la conducta ética en las relaciones entre los sectores público y privado.
En la Declaración además se comprometen a priorizar el desarrollo del capital humano y a promover la formación para el trabajo y la adquisición de nuevas competencias, a fin de desarrollar habilidades de clase mundial en beneficio del capital humano y de la productividad de sus países miembros.
El quinto de los diez compromisos asumidos por la Red es impulsar el desarrollo de una infraestructura intra e inter países moderna y eficiente, y fomentar la rápida adopción de nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Además, posicionar la innovación como un factor determinante para la competitividad, mediante una mayor inversión pública y privada en investigación y desarrollo, y la adopción de políticas y estrategias que la promuevan.
«Mejorar el acceso al capital para los actores económicos, especialmente para las MIPYMES y los emprendedores, y promover mecanismos público-privados para aumentar la inclusión financiera», consigna el séptimo compromiso.
El organismo hemisférico se compromete a fomentar la equidad, la inclusión, el emprendimiento social y adoptar y aplicar principios de responsabilidad social y empresarial, así como la equidad de género.
El décimo compromiso adoptado por consenso es impulsar el comercio y la integración, la competitividad y productividad de la industria, priorizando las MIPYMES y, finalmente, promover la eficiencia y el desarrollo energético para la sostenibilidad ambiental y de bajos niveles de carbono.
