En conferencia titulada “El Cristóbal Colón histórico: de Corsario genovés a Almirante mayor de las Yndias”, que dictó el 23 de enero de 2003 en el salón de actos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid, Alfonso Enseñat de Villalonga, presentó su tesis sobre el origen del navegante, fundada en escritos de Hernando Colón y su investigación genealógica sobre la familia:
“Aún cuando el Colombo de la tesis oficial, tejida por los genovistas a lo largo de 300 años, no tenga nada que ver con el Colón descrito por sus biógrafos y cronistas contemporáneos (Hernando, Las Casas, Oviedo, Anglería, Bernáldez y Marineo), los genovistas siguen empecinados en sus planteamientos y aferrados a su inconsistente teoría y proclaman que todo lo que se oponga a la misma es falso. Yo, en cambio, he seguido el camino inverso. Primero, he definido las señas de identidad del genial navegante, extraídas de los escritos de los biógrafos y cronistas antes citados -únicos depositarios de la verdad salida de labios del propio Colón- y luego he buscado en los archivos notariales genoveses la familia que se adapta rigurosamente a ese perfil”.
En sus pesquisas genealógicas, Enseñat se va a la institución social genovesa albergo -plural alberghi- cuyo nombre adoptaba cada familia miembro como apellido, aunque si cambiaba de albergo, también cambiaba su apellido al nuevo albergo, añadiendo la expresión olim, que significa antes. Identifica de los relatos sobre Cristóbal Colón presentados por su hijo, y sobre sus presuntas relaciones familiares, dos apellidos genoveses a los que pudo pertenecer aquél, Salvago y Colonne. Asevera que el apellido Colombo era inexistente en la Génova de la época, propone la conversión del apellido genovés al castellano como Colón, por el almirante mismo. Así, en un tiempo Colón habría sido Christoforo Salvago y luego Christoforo Colonne olim Salvago. Se complica algo más el asunto cuando presenta un tercer apellido, Scotto, que en 1429 se incorpora a Colonne, y procura demostrar que es a esa familia Scotto, de origen escocés, a la que perteneció Domenico, el progenitor de la histórica familia Colón.
Sin embargo, los escritos de Consuelo Varela revelan dudas sobre cuando menos la inocencia y cuando más la mala intención de los textos de Hernando Colón. Refiriéndose a su relato sobre el corsario Cristóbal Colón, dice ésta: “Don Cristóbal, que aquí actuó como corsario -o en una acción corsaria- precisamente contra su patrón, don Fernando el Católico, no queda bien parado. Al copiar esta carta, ¿se dio cuenta Hernando que su padre había perseguido a naves aragonesas? ¿O, tal vez, el hijo -que no tenía un buen recuerdo del Católico- la copió, precisamente, para fastidiar? (Continuará).
