El jefe de la Policía informó que la muerte de Guillermo Antonio Turull Duluc no aparenta ser un acto delincuencial y presume que el o los autores no eran ajenos a la víctima.José Armando Polanco Gómez sospecha que el homicida estaba dentro de su yipeta Ford Escape negra al momento de ser agredido.
Entretanto, los investigadores analizan las evidencias recogidas en el vehículo, entre ellas el arma homicida, un puñal de unas 12 pulgadas de largo, las prendas del ingeniero y una cartera y otros objetos de valor.
Personas que estaban cuando Turull Duluc llegó mortalmente herido a la clínica Abréu suponen que el lugar donde lo apuñalearon no estaba lejos del centro médico.
Andrés Suazo, también conocido como Arepa, un reconocido parqueador que lleva más de 30 años trabajando en las inmediaciones de la clínica Abreu, relató la sorpresa que se llevó con la abrupta llegada de Turull Duluc, bañado en sangre a consecuencia de la herida que recibió en el cuello.
Según dijo, no sirvieron de nada los esfuerzos por salvar la vida del ingeniero, quien murió ocho minutos después de ser ingresado.
“El venía bajando por la Delgado y me chocó un carro que yo tenía parqueado en esa esquina, luego se estrelló con una yipeta en el parqueo de la clínica”, dijo Suazo.
Señaló que cuando se acercó al vehículo el ocupante estaba inconsciente y lleno de sangre, por lo que tuvo que romper el cristal lateral izquierdo con una piedra para poder abrir la puerta y sacar al hombre.
Debido a la cantidad de sangre que emanaba de la herida tanto Suazo, como otros testigos creen que el incidente ocurrió cerca de la clínica.
El cadáver de Turull Duluc es velado en la funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln y sus restos serán sepultados este jueves a las cuatro de la tarde en el cementerio de la avenida Máximo Gómez.
