Santiago. Delincuentes penetraron a la iglesia del sector San José La Mina, donde rompieron el sagrario. En otra acción también fue asaltada la escuela Salomé Ureña.Para penetrar al recinto católico los maleantes rompieron una persiana y llegaron al segundo nivel donde estaban las hostias consagradas y una copa que luego rompieron. El sacerdote Juan Isidro Matías García, administrador de la jurisdicción parroquial, ratificó que los desaprensivos ingresaron al templo rompiendo la persiana del baño. Del mismo modo, destrozaron la puerta del sagrario, el cual “lanzaron encima del inodoro con el Santísimo Sacramento dentro”.
Sin embargo, el cura párroco enfatizó que a pesar del sacrilegio no se encontraron indicios de robo alguno. Según lo establecido por el arzobispo metropolitano de Santiago, Ramón Benito de la Rosa y Carpio, toda violación del sagrario es considerada como profanación y se debe dejar de celebrar la eucaristía en el referido templo hasta que se haga la misa de desagravios.
Se trata de la segunda profanación que se registra en el templo de la comunidad de La Mina, al sur de Santiago. En la primera ocasión tuvo lugar el robo de los equipos de sonido, instrumentos musicales y hasta las baterías. En repudio a esas acciones, los feligreses oraron dentro del templo.
José Francisco Consuegra, vocero de la junta de vecinos, dijo que los moradores de La Mina decidieron retomar la vigilancia nocturna para evitar que continúen los robos. “Estamos cansados de ver como la policía apresa a los ladrones y luego la justicia los suelta. Queremos más patrullaje nocturno para prevenir que sigan los robos en esta comunidad”, agrega el dirigente comunitario.
Asaltan escuela
Los delincuentes también robaron en la escuela Salomé Ureña del sector Barrio Obrero, donde cargaron hasta parte de las butacas. Allí sustrajeron detergentes y materiales didácticos valorados en RD$6 mil. Varias viviendas también fueron robadas en esa barriada.
A escasa distancia, los ladrones también han robado en tres ocasiones en la escuela de Villa Centro. La pasada semana fueron dos los templos evangélicos asaltados en el sector Los Reyes, al norte de Santiago. El pasado fin de semana se denunció que feligreses de varias iglesias cristinas fueron asaltados a punta de pistola. Desde el pasado año, al menos doce iglesias católicas fueron objeto de robo o profanación en Santiago. La ocurrencia de este tipo de acciones demuestran que para los delincuentes no hay lugares sagrados.
De la Rosa y Carpio pide rechazar estas acciones
Monseñor de la Rosa y Carpio dijo que ante lo acontecido se tendrá que realizar una novena de reparación con oraciones apropiadas delante del Santísimo Sacramento, expuesto en la misma iglesia profanada, pero no se podrá celebrar la eucaristía hasta el décimo día, cuando se haga la misa de desagravios. Cada violación a un templo católico es considerada como ofensa directa a Dios mismo, quien allí habita. Dijo que este tipo de acciones deben ser rechazadas.
